Dragon Ball Z: Kakarot desembarca en consolas y PC para que una vez más vivamos la histórica saga de Goku y compañía, ahora en formato de RPG de acción. ¿Qué significa esto, qué tiene de diferente, y cómo es el juego? Te loc contamos, ¡acá!
Dragon Ball Z, sin lugar a dudas el anime más querido en Latinoamérica, recibe una nueva adaptación a formato videojuego de Bandai Namco. Sin embargo, esta vez la propuesta es diferente y no se trata de un juego de peleas 2D ni 3D como ya pueden haber sido Xenoverse o FighterZ. Dragon Ball Z: Kakarot es algo impensado – un ARPG y juego de aventuras que nos cuenta la historia de la serie desde la llegada de Gohan hasta la eventual pelea con Majin Buu.
¿Qué es?
Lo primero que tenemos que aclarar, que no puede ser remarcado lo suficiente, es que esto no es el típico juego de peleas de Dragon Ball. No hay modos torneo, no hay multiplayer, ni arcade. En vez de eso contamos con la más extensa versión del modo historia jamás creada en base a la saga. En las botas de Goku podremos recorrer mundos semiabiertos y revivir momentos claves de la serie como los combates contra Raditz, Nappa, Vegeta, las fuerzas Ginyu, Freezer, los Androides, Cell, Babidi y Majin Bu. Sí, toda la etapa Z está contenida en este título.
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En Dragon Ball Z: Kakarot podremos recorrer el mundo de la serie en formato semi-abierto, donde diferentes zonas componen un mini open world en sí mismas. Así podremos visitar diferentes puntos del mapa que se desbloquearán a medida que progresemos la historia. En cada área encontraremos personajes de la serie que harán progresar la trama, nos darán objetos de bonus, o nos harán encargos. Pero que esto sea un RPG de aventuras no quiere decir que la parte de acción esté descuidada, y así cada mapa estará lleno de enemigos dispuestos a impedirnos el paso, a la vez que cada encuentro clave de la serie está recreado con todos sus momentos clave.
El combate
Este es sin dudas el aspecto que más nos sorprendió de Dragon Ball Z: Kakarot, porque años de juegos de pelea nos acostumbraron a otra cosa. Esta entrega no se parece exactamente ni al formato de Xenoverse ni al de FighterZ, sino que recuerda más a la clásica saga Budokai Tenkaichi de algún modo, y aún así es distinto. Si bien el juego se llama Dragon Ball Z: Kakarot, Goku no será el único personaje que controlemos y a medida que la historia progresa tomaremos control de otros héroes como Gohan, Pikkoro o Vegeta, por ejemplo. ¿Más personajes? Salvo contadas excepciones, quedarán relegados a un secundario rol de soporte así que olvidate de Yamcha, Ten Shin Han, Yajirobe, y hasta el propio Krilin.
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Las diferencias de poder entre los personajes están profundamente marcadas (por ejemplo, si peleas contra Chaoz usando a Pikkoro, vas a ganar siempre), y además, a medida que pelees, completes quests y más tus héroes van a subir de nivel y volverse cada vez más fuertes. Esto da lugar a combates que realmente se sienten como en la serie, especialmente en la primer parte del juego: Raditz parece tener una fuerza increíble cuando Goku en nivel 3 a 5 intenta hacer tiempo y que Pikkoro prepare su Makkankosappo. Pero, además, hay más diferencias con otros juegos de pelea – ahora hay mucho más énfasis en navegar las tres dimensiones y apartarse con rápidos movimientos de los ataques, telegrafiados para que esquives en el momento justo, y con varias fases que tenés que leer.
En los botones frontales del joystick tendremos un ataque melee, un ataque de ki, el botón para cargar ki, y finalmente el botón para desvanecerse o movernos a alta velocidad. Al igual que en los juegos de pelea, lanzar un especial es cuestión de mantener los gatillos y elegir el que queramos realizar, mientras que al mantener dos a la vez podremos usar transformaciones para aumentar nuestro nivel de poder. Finalmente, también podremos apoyarnos en nuestros camaradas para usar sus ataques o desbloquear un embate grupal poderosísimo cuando todos están con su respectiva barra llena.
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La exploración
El otro gran pivot sobre el que Dragon Ball Z: Kakarot se construye es la dimensión de explorar. ¿Alguna vez te preguntaste a cuánto queda la casa del Maestro Roshi de la de Goku? Acá tenés un mapa completo que te muestra la ubicación de cada una, cuánto más lejos queda Capsule Corp donde vive Bulma, y hasta donde se fue Goku para entrenar con Kamisama. El nivel de cariño y amor que cada uno de los mapas tiene es increíble, y si sos un fanático de la serie que le gustan los detalles, te vas a encontrar con montones de referencias a la serie y eventos.
Si bien Dragon Ball Z: Kakarot se puede jugar de forma lineal, uno de los aspectos mejor pensados para el fan es poder explorar el mundo y enfrentarse a robots de la vieja Patrulla Roja, destruir sus bases, o simplemente dedicarnos a obtener recursos en el mapa. A medida que progresemos, podremos venderlos o usarlos para crear platos de comida y mejorar nuestras estadísticas. Finalmente, el último gran detalle son las sidequests fuera de la historia principal con la que podremos sumar medallas para desbloquear nuevos ataques, o personajes para nuestro tablero de almas.
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Los Community Board son tableros de siete tipos diferentes que cada uno nos da un bonus particular a medida que lo nivelamos. Así, las sidequests nos arrojarán nuevos personajes (“Soul Emblems“) que deberemos ubicar en el tablero, que además tienen el componente extra de mejorar la propia sinergía dependiendo de con quienes esté conectado, que recompensa el conocimiento de los personajes y la serie. Del mismo modo, también en menú podremos desbloquear mejoras para nuestros héroes, habilidades pasivas, ataques más fuertes y más, e incluso hay un modo donde deberemos superar un desafío antes de poder habilitar un nuevo ataque.
El apartado audiovisual
Dragon Ball Z: Kakarot se ve y suena hermoso. El look de los personajes se corresponde con cada saga, es fluido, y permite apreciar cada uno de los ataques o transformaciones que viste en la serie o manga. Por el lado del sonido, cada golpe y ataque suena exactamente como debería, a la vez que podremos oír las voces en el original japonés o en inglés, con los actores del elenco oficial. Al ser un juego tan completo y con tanto énfasis en la historia, si hubiera uno solo al que le pediríamos un doblaje al español latino con Mario Castañeda, René García y Laura Torres, definitivamente hubiera sido este.
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En conclusión
Dragon Ball Z: Kakarot camina la más delgada línea con éxito – es un producto creado para complacer al más fanático de los fans, pero en ningún momento deja de ser un gran juego. El nivel de cuidado y detalle en cada mundo demuestra auténtico cariño por el material base, y si bien en algún momento el juego se puede sentir repetitivo, son concesiones que se hace con el género de los shonen incluso al ver las series originales. Depende de tus gustos, Dragon Ball FighterZ puede ser mejor juego de pelea o Dragon Ball Xenoverse 2 puede ser el que tenga más personajes, pero Dragon Ball Z: Kakarot definitivamente es el que mejor recrea la experiencia de sentarte a mirar Dragon Ball.
FECHA DE LANZAMIENTO | 17 de enero de 2019 |
DESARROLLADOR | CyberConnect2 |
DISTRIBUIDOR | Bandai Namco |
PLATAFORMAS | PlayStation 4, Xbox One, PC |