Westworld acaba de ser renovada para una cuarta temporada, y HBO nos dio la oportunidad de hablar con Shay Cunliffe, creadora de los looks impactantes de la tercera.
Como su nombre lo indica, Westworld está ambientada en un mundo que simula el Viejo Oeste… o al menos esto era cierto en las primeras dos temporadas. Sin muchos spoilers, podemos decir que este tercer año de la serie nos invita a conocer el mundo fuera de ese parque de diversiones: un lugar violento y peligroso en el que nuestros héroes planean una sigilosa revolución.
Cada temporada de Westworld ha tenido un diseñador distinto. Ane Crabtree (The Handmaid’s Tale) fue la responsable original de ese universo de western artificial. Sharen Davis (Dreamgirls) se encargó de los kimonos y saris de la delirante segunda temporada.
En esta ocasión el rol de vestir a estas ciudades cyberpunk le tocó a Shay Cunliffe, diseñadora con más de 30 años de experiencia en cine de acción estilizado, con éxitos en su haber como Bourne: El Ultimátum, la versión norteamericana de El Secreto de Sus Ojos con Julia Roberts, y la adaptación de Stephen King Dolores Claiborne.
A pesar de que Westworld es la primera serie de televisión de Cunliffe, su trabajo se destaca en cada escena. Desde el vestuario simple pero estilizado de la vida cotidiana en esta ciudad futurista, hasta el glamour de los años ‘40 del mundo WarWorld, o el look “villano de Bond” del misterioso Serac (Vincent Cassel) hasta una subasta humana que fue casi como una versión minimalista de la mascarada de Ojos Bien Cerrados.
HBO nos brindó la chance de conversar con Shay sobre algunas de sus creaciones más interesantes de esta temporada – y de paso, la felicitamos por la renovación de Westworld para una cuarta parte.
Ojo! Si bien la nota no tiene spoilers, puede contener descripciones de escenas que aún no viste si no estás al día en la tercera temporada.
¡Primero que todo, felicitaciones por la confirmación de la cuarta temporada! Nos encanta tu trabajo de vestuario en esta tercera temporada.
¡Gracias! Estoy muy contenta con cómo quedó. En general me cuesta ver mi trabajo meses después porque le encuentro un montón de detalles, pero en este caso me gustó mucho.
El estilo de la tercera temporada es tan distinto a lo que vino antes…
Es que es como si fuera una serie nueva. Lo único que queda son estos personajes increíbles, pero con historias distintas.
Trabajaste en películas, como Lone Star de John Sayles (favorita del redactor), pero en tu carrera has hecho principalmente películas realistas como El Secreto de sus Ojos y cine de acción como Bourne.
No vienes de ciencia ficción, entonces ¿por qué creés que los showrunners te eligieron para esta temporada de ciencia ficción de Westworld?
¡Yo también me sorprendí! Cuando fui a la entrevista de trabajo le dije a mi agente que todo esto era ridículo. Pero siempre me interesa hacer algo distinto a lo que venía haciendo. Pasé de películas de guerra a cosas como la secuela de 50 Sombras de Gris, me gusta mezclar estilos.
“(Jonathan Nolan) se dio cuenta que yo no iba a irme por el lado de la ciencia ficción “flashera”, sino tratar de seguir a los personajes y apoyar el camino en el que iba la historia.”
En verdad, nunca les pregunté por qué habían pensado en mí, porque (riéndose) ese no es el tipo de preguntas que hacés en el trabajo: “¿por qué cuernos yo?”. Creo que necesitaban a una persona acostumbrada a trabajos exigentes, pero que a la vez sea flexible.
Con Jonathan (Nolan) conectamos con nuestro amor por la historia del cine, charlando sobre películas clásicas. Y creo que ese lado de él se dio cuenta que yo no iba a irme por el lado de la ciencia ficción “flashera”, sino tratar de seguir a los personajes y apoyar el camino en el que iba la historia.
Justo que hablás del amor de Nolan por el cine clásico, se puede decir que las escenas de War World en esta temporada son algunas de las más destacadas, al estilo del glamour de los años ‘40… ¿hay alguna inspiración particular para el aspecto de Maeve y Ettore?
Es una mezcla entre un homenaje a películas de la época, y a la vez nos basamos en documentos históricos. Encontramos fotografías de los combatientes partisanos de la resistencia… y va a sonar superficial de mi parte, pero era gente que se veía fabulosamente bien, a pesar de la seriedad de la pesadilla que estaban viviendo.
“Todos mis trabajos ambientados en el pasado empiezan con eso: identificar cuál es la realidad.”
Pero estos partisanos, de los que ni siquiera se sabe el nombre, eran figuras aspiracionales. Me senté a ver esas fotos con Rodrigo Santoro, el actor que interpreta a Héctor / Ettore y fuimos creando una caracterización basada en esa gente. Gente real.
Todos mis trabajos ambientados en el pasado empiezan con eso: identificar cuál es la realidad, teniendo en cuenta que también tiene que ser atractivo. Buscar la versión más bella, más estilizada de la época.
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Es interesante lo que decís de que tu trabajo está atado a la realidad, porque en una entrevista que diste a principios de la temporada contaste que ese famoso vestido negro que se convierte en dorado de Dolores no fue un efecto visual sino un truco práctico inspirado en tu propia experiencia en el teatro.
¡Sí! Al principio de mi carrera trabajé en pequeñas producciones en la East Village de New York, a fines de los setenta. De esas que pagaban 60 dólares y te daban 100 para vestir a todo el elenco.
En esa época estaban de moda las obras tipo performance, en las que artistas sin un centavo querían que el escenario cambie de forma y color, de vueltas y se vea distinto a cada minuto. Y yo amaba ese desafío.
Dolores es un tipo de personaje que amo hacer. La historia la presenta como una mujer misteriosa al estilo film noir, y este cambio de vestido tiene que ser un verdadero momento teatral. Mi trabajo fue encontrar la forma de esconder la tela dorada dentro del vestido negro, y que al soltarlo se deslice.
¡Honestamente me da un poco de pena que no lo mostraron más tiempo! Usaron un plano del costado, pero el efecto era impresionante de frente.
¡Ojalá que cuando salga la edición en Blu-Ray vamos a poder ver esas imágenes que no salieron! Con respecto a la teatralidad del planteo, hay una escena de subasta humana al estilo Eyes Wide Shut en el cuarto episodio donde realmente llevaste la alta moda a un extremo.
Impresiona, por ejemplo, una falda de aro rosa que usa una de las modelos, o el abrigo de estilo soldado sobre el cuerpo de una mujer desnuda. ¿Podrías elaborar un poco sobre tus elecciones en esa escena?
En el momento en que supimos que se venía esta escena, empezamos a armar “mood boards” (collages visuales que mezclan distintos tipos de elementos) para entender cómo podíamos plantearla.
Nuestras referencias fueron los grandes diseñadores de moda. Estudié a Jean Paul Gaultier, a Thierry Mugler, el trabajo de John Galliano. Muchas de las piezas que se ven en la subasta están inspiradas en moda de los ‘80 y los ‘90, y en particular en un cuadro que Jonathan Nolan ama, llamado “Parce Domine” (“libéranos, señor” en latín). Es uno de muchos cuadros que inspiraron esta temporada.
No se por qué o cómo, pero en la sala de vestuario teníamos una reproducción del cuadro, y si lo ves, es básicamente esa escena de Ojos Bien Cerrados. El esquema de colores de esa escena está ahí, en el cuadro.
Cuando hablabas de la teatralidad de tu trabajo, Es muy importante en la historia de esta temporada el uso del color blanco. Llama mucho la antención la vestimenta blanca de William en el hospital psiquiátrico. No se parece a ningún equipo clásico de este tipo de instituciones… ¿cuál fue su inspiración?
Realmente no fue un diseño original nuestro. Cuando estamos ambientando una escena con varios personajes usamos esos mismos mood boards que armamos al principio de la temporada para que cada espacio sea coherente con la estética de la serie.
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Sabíamos que iba a ser un futuro despojado, con colores planos y trajes tipo mamelucos, y en esa escena en particular compramos ropa previamente diseñada que se ajustara al estilo. Cada vez que hacemos eso, igual, la intervenimos, sacando todos los detalles aburridos y poniendo cosas “nuestras”, que tengan que ver con nuestro futuro.
Te cuento que la serie recién la estoy viendo ahora, en HBO, así que hay un montón de cosas que estoy conectando sobre la simbología de los colores que está explícita en el texto. La dicotomía blanco/negro del “hombre de negro” y “hombre de blanco.”
“Serac cree que Maeve es su criatura, como si le perteneciera.”
La verdad es que elegimos el blanco para diferenciarlo de los trabajadores y cazarrecompensas de la ciudad, que estaban vestidos de negro…¡Pero cuando lo ves ahora parece una gran decisión de diseño! Obviamente los showrunners (Nolan y Joy) tenían algo en mente cuando les mostré las dos opciones y eligieron el blanco.
También hay una escena en la que Maeve y Serac se encuentran por primera vez, los dos de blanco…
¡Sí! Esa escena está inspirada directamente en la locación en la que se grabó. Es una fábrica de cemento abandonada en las afueras de Barcelona, que el arquitecto español Ricardo Bofill recicló en los setenta. Un lugar visualmente muy complejo que me generó una pregunta: “¿cómo podemos hacerlo más simple?”
Maeve tiene un cierto tipo de grandeza, y quería para ella un estilo muy limpio. Hay un elemento de seducción entre ella y Serac, aunque obviamente nunca vayan a tener ese tipo de relación. Hay una dinámica especial que ella subvierte, porque Serac cree que Maeve es su criatura, como si le perteneciera. “La Fábrica”, la espectacular edificación reciclada por el arquitecto Ricardo Bofill donde se filman las escenas de Serac
Con respecto al look de él, estuve mirando fotos de gente adinerada, aristócratas, para tratar de identificar cómo se ven cuando están de entrecasa. Terminé eligiendo ese blazer deportivo de Tom Ford, ¡y me da pena que no puedas ver la parte de abajo de su traje! Eran unos joggings grises que completaban muy bien el look.
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Pero respondiendo a tu pregunta, no estoy segura de que haya mucho simbolismo, ya que Jonathan no estaba seguro al principio si los quería de blanco. Hubo muchas idas y vueltas con el look hasta que me dijo: “Shay, decidí vos.”
¡La última! En una serie como Westworld, que se toma a sí misma muy en serio, sorprende un toque genial de humor. Cuando el personaje Liam Dempsey pierde toda su fortuna, usa una remera que dice “BÁSICO” en el frente, ¿fue idea tuya?
¡A mi también me encantó! Pero no, es un chiste que vino directamente de los guionistas. Sabíamos que la idea era despojarlo de todo lo que represente riqueza, pero el texto estaba en el libreto. Lo que nosotros sumamos fue elegir una remera de un talle más grande, como para aumentar esa sensación de despojo.