Star Ocean: The Last Hope Remastered trae uno de los clásicos de la pasada generación a las consolas modernas y nos recuerda por qué esta serie es tan especial. Leé todos los detalles de este relanzamiento, ¡en esta nota!
Star Ocean es una serie de RPGs clásicos que, aunque nunca pudo competir cara a cara con Final Fantasy, Dragon Quest o Persona, siempre se destacó por tener una identidad única y propia. La franquicia hizo su debut allá por los años de la PlayStation 1, y para 2009 nos sorprendía con Star Ocean: The Last Hope para PS3 y Xbox 360 en años que los RPG japoneses brillaban por su ausencia. Ahora, la serie regresa con una remasterización donde la gran estrella son los sorprendentes gráficos 4K en PC y PS4 Pro, o la posibilidad de dejar las voces en su japonés original.
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Star Ocean: The Last Hope es el cuarto juego en la franquicia, y nos pone al frente de una aventura espacial llena de personajes estilo anime y combate de acción pero con elementos RPG. En este título controlaremos al capitán Edge Maverick y su amiga de la infancia Reimi “soy igual a D.va de Overwatch pero con shorts” Saionji. Ambos son soldados terrícolas, que buscan mundos para que la humanidad se expanda debido a que el planeta está prácticamente perdido. Esto los lleva a conocer a un montón de pintorescos personajes, como todo juego de su género, y a una lucha por el destino de la humanidad.
El juego usa un sistema de combate en el cual controlaremos a un personaje que elijamos en batalla, y la computadora se hará cargo de los otros 3, con patrones que nosotros asignemos. El combate es en tiempo real, y te movés a lo largo y ancho del campo de batalla mientras ejecutas ataques y combos, pero a medida que subís de nivel aprendes hechizos y técnicas (“símbolos”) que usas con R2 y L2. Si bien empieza simple, con el paso de las horas se complica y sorprende por la profundidad que oculta debajo de sus pocos comandos. También vas a poder cubrirte, cargar tu barra de rush para aumentar tu fuerza y velocidad, y sorprender enemigos con ataques por la espalda.
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Quienes hayan jugado la versión de Xbox 360 del juego notarán que esta versión incluye el Bonus Board, el “tablero” que debutó en la versión de PS3. La idea de esto es que completemos ciertos requerimientos en combate para llenarlo de gemas, y obtengamos bonificaciones al final de las batallas. Por ejemplo, matar muchos enemigos de un solo ataque o dar un golpe crítico, multiplica la experiencia ganada. A la vez, si nuestro personaje es impactado por un golpe crítico, o es derrotado, perderemos estas bonificaciones.
En Star Ocean: The Last Hope Remastered podremos crear items, y buscar recetas por toda la galaxia para volvernos más fuertes. A la vez, las Private Actions ofician de sidequests pero con contenido de historia y nos invitan a recorrer la galaxia y tener interacciones entre personajes sin que necesariamente se progrese la trama, algo que se perdió en los RPGs modernos pero ayuda a que los personajes se sientan más reales y queribles. El punto negativo es que para salvar, tenés que encontrar puntos de guardado como antaño, y a veces los lugares que deberemos explorar son inmensos y puede pasar bastante rato antes de que puedas dejar de jugar en paz.
Star Ocean: The Last Hope Remastered es lejos la mejor versión de este clásico, y queda más que recomendado para los jugadores con nostalgia de los JRPGs. Si se considera el modo que hoy se juegan algunos de los RPGs más aclamados del año como Nier: Automata o Final Fantasy XV, está claro que Star Ocean fue un pionero en lo suyo, y los espectaculares gráficos en 4K hacen que la experiencia sea vibrante y viva. Eso sí, si los JRPGs no son lo tuyo, este juego te puede parecer indulgente, y lleno de clichés, pero en su defensa, nunca pretendió ser más que una aventura en el espacio llena de elfos, y personajes de anime.