Nvidia canceló la compra de ARM por 40.000 millones de dólares debido a los obstáculos regulatorios de distintas partes del mundo y ahora deberá abonar más de 1000 millones de dólares a Softbank por la cancelación del acuerdo. Conoce los detalles ¡acá!
La adquisición de ARM, la empresa fabricante de semiconductores y software, por parte de Nvidia se anunció en 2020, sin embargo, el trato aún no pudo concretarse debido a los numerosos obstáculos regulatorios. En los últimos meses, surgió un reporte en donde aseguraban que el acuerdo se cancelaría, finalmente Financial Times confirmó los rumores y no habrá trato.
Nvidia cancela la compra de ARM, el mayor proveedor de chips de la industria tecnológica
El medio especializado en economía reportó que Nvidia abandonó la adquisición de ARM, la que podría haber sido la mayor transacción en la industria de los chips: una compra de 40.000 millones de dólares. Los entes reguladores se centraron en la importancia de ARM para la competencia y la FTC (Federal Trade Commission) de Estados Unidos creía que la adquisición pondría en peligro la estrategia de licencias abiertas a largo plazo, y es que ARM tiene licencias de semiconductores para empresas como Qualcomm, AMD o Intel, que son competencias directas de Nvidia.
Los reguladores de la Unión Europea, Reino Unido y Estados Unidos investigaron rápidamente la fusión de ARM con Nvidia cuando se anunció la adquisición en septiembre de 2020. El año pasado, la FTC presentó una demanda en la que citaba que la tecnología de ARM se usaba en una variedad de industrias como la de mobile, que abarca tanto smartphones como tablets de Android. Asimismo, tiempo antes del bloqueo de la FTC, la Unión Europea investigó a Nvidia y aseguró que la empresa no había “ofrecido suficientes concesiones” para afirmar que la empresa de semiconductores se mantendría como proveedor de marcas como Samsung, Apple o Qualcomm.
Por otro lado, Softbank anunció que sustituirá al CEO de ARM, Simon Segars, por René Haas, quien es el actual director de propiedad intelectual en la compañía. La reorganización ejecutiva es el resultado del fracaso del acuerdo con Nvidia, según el Financial Times. Con la cancelación de la adquisición, Nvidia pagará ahora tendrá que abonar 1.250 millones de dólares a Softbank.
