Algunos juegos no pasan de moda y en Cultura Geek te presentamos esta lista con los mejores arcades plataformeros de los años 80 ¡Leela acá!
Los 80’s, época de oro de los salones de arcades, ofrecieron una infinidad de clásicos que al día de hoy aún jugamos. A veces hay tantos que es difícil elegir cuál jugar, pero no desesperes. Te recomendamos que te pongas tu remera flúo, tus anteojos aviador, abras tu emulador favorito y juegues a estas joyas que te van brindar varias horas de diversión y nostalgia.
En Cultura Geek te traemos una lista de los mejores juegos de plataformas que podíamos encontrar en esa época única tan llena de innovaciones.
Psychic 5 (Jaleco – 1987)
Un juego muy poco conocido pero con gráficos inolvidables. Aquí, podemos manejar a un total de cinco personajes que tienen habilidades específicas que nos servirán para avanzar. Pero ojo, solo podremos completar los escenarios si los usamos correctamente. Casi una “gema oculta”.
Bomb Jack (Tehkan – 1984)
En este juego somos una especie de ratón disfrazado de superhéroe que tiene que recoger bombas en un tiempo determinado. Todo esto, antes de que aparezcan robots asesinos mientras paseamos por el mundo. Si esto no te atrae, no tenés sangre ochentosa en las venas.
Pang (Mitchell – 1989)
Otro divertido plataformero en el que viajamos por el mundo con el objetivo de poner “cables” para romper globos que flotan y se desarman. Claro, todo eso representa un peligro para nuestra frágil integridad. Colorido y original por partes iguales, ideal para esos “cinco minutos de pausa y sigo con el trabajo”.
Pac-Land
Pac-man se embarca en una aventura y recorre su “planeta” mientras sus eternos y fantasmales enemigos lo persiguen. Tendremos que llevar a un hada en nuestro sombrero hasta su lugar de origen, Fairyland, y luego regresar a casa. Tiene gráficos cartoonescos, inspirados en la serie que Hanna Barbera lanzó en 1982 que hacen que nos volvamos a enamorar del clásico personaje amarillo.
Pitfall II – The Lost Caverns (Sega – 1984)
Si bien el original salió primero en Atari 2600, esta versión para arcades desarrollada por Sega trae tantos cambios y mejoras que es casi un juego nuevo. Controlaremos a Harry, mientras esquivamos a cocodrilos, cobras, escorpiones y arenas movedizas. Desafiante y adictivo como pocos.
Rygar (Tecmo – 1986)
Uno de esos juegos que en su época fascinaron a los jugadores con su maravilloso pixel art, lleno de fondos mezcla de prehistoria y apocalipsis. En este caso, somos un Guerrero Legendario que ha revivido para acabar con el reinado de mal de Ligar, con la ayuda de nuestra arma Diskarmor. Su música y sus personajes quedan en la memoria de todos los que lo vimos en los arcades.
Donkey Kong (Nintendo – 1981)
La primera aparición en esta lista de un personaje “un poco conocido”: Mario, quien era llamado en ese momento “Jumpman” de forma interna y que luego se transformaría en la mascota de Nintendo. También es el debut del gorila gigante que da nombre al juego y que luego tendría su propio lugar en el mundo gamer. Difícil como pocos pero adictivo a más no poder.
Wonderboy in Monster Land (Sega – 1987)
El primer Wonderboy es un clásico con mayúsculas, para qué negarlo. Sin embargo Sega le encontró la vuelta a la innovación y sorprendió a los jugadores con esta maravilla que introduce un gameplay más pausado, pero que da muchas más posibilidades en su desarrollo. En pocas palabras, imperdible.
Ghost’n Goblins (Capcom – 1985)
Un infaltable de los salones de arcades, un juego que trajo su mezcla de fantasía y terror medieval que se hizo famoso por su despiadada dificultad. Pero también es dueño de un gameplay ajustado y adictivo que aún es recordado por todos los que lo jugaron. Hoy tenemos la ayuda de continuaciones infinitas, pero no por eso deja de ser tan divertido como en su época. Clásico sin tiempo.
Bubble Bobble (Taito – 1986)
Sin duda, uno de los mejores para jugar con amigos. Una aventura en la que tenemos que recorrer 100 niveles (¡y gran cantidad de escenarios secretos!) mientras eliminamos, atrapándolos en glovos, a los variados enemigos que nos obligarán a ajustar la estrategia en cada pantalla. Adictivo y colorido, Bubble Bobble es para muchos el mejor plataformero de la historia.
Por Daniel Belvedere para Cultura Geek