SpaceX hizo historia. Por primera vez desde la era espacial se logró de manera exitosa lanzar un cohete con carga al espacio, retornarlo para reutilizarlo, y aterrizarlo en una plataforma flotante en medio del mar. Lee más sobre este particular evento, ¡en esta nota!
Para quien no lo sepa SpaceX es una empresa fundada por Elon Musk, el mismo que co-fundó PayPal y Tesla Motors, y se dedica principalmente a abastecer la Estación Espacial Internacional mediante contratos con la NASA. En los viajes que la agencia estadounidense les encomienda, aprovechan y prueban nuevas tecnologías como los cohetes reutilizables, que luego de ser lanzados al espacio, vuelven a caer en la tierra y descienden suavemente para ser reacondicionados y vueltos a usar en futuras misiones.
¿Por qué es tan importante ésto? Porque los cohetes con los que se lanzan los satélites o provisiones para la Estacion Espacial internacional son caros, y por el momento no se han podido reutilizar con éxito porque cuando caen a la tierra en general se destrozan contra el piso, o se incineran en la atmósfera. Para intentar abaratar costos, tanto SpaceX como otras compañías espaciales trabajan en un tipo de cohete que se pueda volver a lanzar después de una misión. Si para cada misión hay que hacer un cohete completamente nuevo, se deben invertir millones de dolares en rehacer una nave desde cero. Pero si eso no suena lo suficientemente complejo, desde SpaceX tuvieron la brillante idea de que para minimizar peligros, el cohete una vez que este retornando a tierra, debe dirigirse a una plataforma marina robotica en medio del mar.
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Si bien el 8 de Abril del 2016 quedará en la historia como el día que consiguieron aterrizar el cohete con éxito, debemos recordar que ésto fue gracias a muchas pruebas en tierra, y muchos accidentes probando el retorno a la plataforma marina, como por ejemplo éste descenso fallido en el mar en Abril de 2015:
Entre los beneficios que obtiene SpaceX al aterrizar sobre una plataforma móvil marina su aeronave, se encuentran por ejemplo, no tener que pedir permisos especiales al gobierno ya que no afecta ninguna parte del territorio de un país (es posible desplazarla rápidamente en caso de que el cohete se haya desviado un poco de su curso), y además, abarata los costos de seguridad.
En total, la compañía ha realizado más de 20 intentos hasta poder festejar éste éxito histórico. Ahora si, felicitamos a Elon Musk por seguir cambiando la historia con SpaceX, como ya lo hizo con los pagos electrónicos en PayPal y con los vehículos eléctricos Tesla.
En las siguientes imágenes podrán ver lo que fue el primer descenso exitoso del cohete hacia una plataforma marina:
Y así quedo, bien posicionado y sin daños, para ir a recuperarlo, y volver a ponerlo a punto: