Final Fantasy VIII Remastered debutó de sorpresa en dispositivos Android y al fin podés llevarlo a todos lados con vos en tu smartphone. Te contamos qué tiene de especial esta versión, cómo corre en un Moto G9 Plus y más, ¡a continuación!
Tras años de espera por una eventual versión para smartphones, Final Fantasy VIII Remastered finalmente está disponible para dispositivos móviles. Es un juego que se hizo esperar, si consideramos que prácticamente todos los juegos de la saga anteriores e incluso el IX ya estaban disponibles. Pero posiblemente tiene que ver con su reputación de juego complicado: los que lo aman, juran por él. Los que lo odian, afirman que es uno de los peores de la serie. Tras jugarlo en el Moto G9 Plus, estas son nuestras impresiones.
Sistema de combate
Si nunca jugaste Final Fantasy VIII, lo primero que tenés que saber es que es un RPG por turnos, pero con la famosa barra ATB. Con este sistema, tus personajes actúan cada vez que se llena su barra, y de ahí podés lanzar ataques, usar magia o ítems para pelear. Lo segundo que te contamos es que los valores de producción son increíbles para un juego de 1999, y que ahora esta versión hace lo posible para modernizarlo y traerlo al presente. Se ve mucho mejor que en una PlayStation 1, pero hablaremos de esto más adelante. Tercero, el sistema es increíblemente personalizable, y tu personaje no puede hacer nada excepto atacar a menos que equipes las habilidades necesarias.
Final Fantasy VIII Remastered es denso en tutoriales en un principio, pero es necesario para ahondar en sus sistemas. Básicamente, los héroes utilizan GFs (Guardian Forces, o Fuerzas Guardianas) que al equiparlas les dan habilidades para hacer todo lo demás. En vez del sistema de subir niveles típico de todo RPG, que está presente, el énfasis se encuentra en equipar magia pegada a un estado con las habilidades que te dan las GFs y así aumentar su número. De este modo, da lo mismo si sos nivel 10 o nivel 100, lo importante si querés pegar fuerte, por ejemplo, es combinar tus hechizos más potentes con la fuerza. Si, en cambio, querés recibir menos daño de golpes, combinar tu vitalidad con un hechizo que la beneficie.
Es un sistema complicado de entender y con un montón de trucos (por ejemplo, no es lo mismo tener 4 hechizos de fuego que 100, el máximo). Sin embargo, a la vez esto da espacio al sistema más profundamente modificable en la historia de la saga, y podés construir cada uno de sus seis personajes a gusto, con las habilidades que quieras, y acomodarlos a tu estilo de juego. La diferencia entre los personajes llega por el lado de su habilidad individual, un limit break que le permite realizar una acción especial única. Así, tenemos el caso de Squall o Zell, que hacen sucesiones de golpes, Quistis reproduce hechizos de otros enemigos, Selphie y Rinoa hacen magia e Irvine usa diferentes municiones.
Definir el sistema de juego como “elegante” sería la más vil de las mentiras – es difícil de entender, y aún más difícil de saber cómo usarlo, pero si le agarras la mano posiblemente sea el sistema más satisfactorio de la saga. Es genial poder romper el juego con habilidades y sinergias que dobleguen a los enemigos y te hagan sentir espectacularmente poderoso. Incluso capaz de proponer soluciones inteligentes a bosses que muchas veces son más un puzzle que otra cosa. Podés explotar vulnerabilidades, definir los momentos claves con un limit break, ir a lo seguro y usar magia de protección, y mil cosas más en las que podés perderte mientras vivís su historia.
La historia
Como este es un RPG, más allá del sistema de combate que puede gustar o no, parte vital de la experiencia es la trama. En el juego controlamos a Squall y un grupo de cadetes de una especie de liceo para mercenarios llamado Garden. El tono va entre comedia adolescente de pibes de secundario y guerras entre países por la influencia de poderosas hechiceras. Imaginate una versión ultramilitarizada de Harry Potter con protagonistas que tienen una estética muy de fines de los 90s, pero en vez de crecer y hacerse policías son mercenarios. No es para todo el mundo, pero si te enganchás, lo vas a amar.
A lo largo del juego tendremos la oportunidad de pasar tiempo con los seis protagonistas y especialmente con Squall, un pibe bastante mala onda pero con el que más de uno nos terminamos sintiendo identificados. Esta no es una historia de héroes alegres y de fantasía. En este mundo de guerrillas, brujas, tecnología sci-fi y más, nuestro protagonista es bastante serio, pero con un sentido del humor ácido, y la gracia muchas veces es ver cómo el tipo se frustra viendo el mundo a su alrededor. Parece el único tipo normal entre un mundo de idiotas y si el tono fuera menos de anime y más de comedia pura y dura, no desentonaría al lado del Guybrush Threepwood de Monkey Island 1. Si, en serio hicimos esa comparación.
Si jugaste otros Final Fantasy, sabés que eventualmente la trama va a ir para el lado del fin del mundo y que lo tenés que salvar. Eso quizás sea lo único que mantiene en común con el resto de la saga, porque montones de jugadores se frustran con su complejo y abierto sistema de pelea. consideran que es demasiado complicado para ser divertido. Esto va depender puramente de tus gustos y de lo rápido que los sistemas hagan click.
Cómo se siente jugarlo en un Motorola
Final Fantasy VIII Remastered es fiel a lo que los jugadores de consola ya experimentaron con sus respectivos remasters. Por ejemplo, el juego usa los modelos nuevos de alta definición mucho más detallados, donde se aprecian mejor las expresiones, detalles en la ropa y en batalla se ven excelentes. Los fondos, por otro lado, se ven un tanto borrosos, problema que tenía el remaster de consolas también. Pero al ver toda la acción en una pantalla de Moto G9 Plus, es mucho menos molesto que en una TV y no distrae para nada. El mejor aspecto, sin embargo, es la música de Nobuo Uematsu que suena mejor que nunca.
Finalmente, en cuanto al control, el juego conserva la relación de aspecto original de 3:4, por lo que las franjas negras del costado se usan para mostrar parte de los controles táctiles sin interferir en la pantalla. El único “problema”, depende de cómo juegues: no hay compatibilidad para joysticks.
En cuanto al espacio, ocupa 2.59GB, que no está mal para un juego que te puede llegar a tomar unas 60 horas completar. Lo podés descargar de Google Play donde cuesta $20.99 dólares.
En conclusión
Final Fantasy VIII Remastered finalmente está entre nosotros para traer el último juego de los originales a Android, y con esto toda la saga está disponible. La versión que llega es muy digna y noble, hace bien todo lo que deberías esperar de ella. Si jugaste el juego original en los 90s, es un vehículo de nostalgia espectacular con el que la vas a pasar muy bien. Si querés descubrirlo por primera vez, es un modo excelente de ver de qué se trata todo. Sin embargo, tené en cuenta que ya de por sí los RPGs no son para todo el mundo, y que FFVIII en particular quizás sea uno de los más complicados de todos.
| FECHA DE LANZAMIENTO | 16 de marzo de 2021 |
| GAMA | Baja / Media / alta |
| DISTRIBUIDOR | Square Enix |
| PESO | Alrededor de 2 GB, varía por dispositivo |