ASUS ROG Scar III el último modelo de la compañía asiática para el segmento gaming fue presentado en los últimos meses. A continuación te contamos nuestra experiencia con esta auténtica bestia.
Asus Rog Scar III debutó hace escasos meses. Esta es la tercera edición de la marca taiwanesa en su gama de notebooks o portátiles orientadas al publico gamer casi de forma exclusiva. En Cultura Geek tuvimos la oportunidad de ponerla a prueba y te contamos nuestras impresiones en esta Review.
Gamer y RGB: Un dúo inseparable.
Sin duda la primera impresión que nos llevamos con esta Scar III es su aspecto futurista y la abundante presencia de iluminación RGB tanto en su teclado, el cual es completamente customizable, como en su Aura Sync Bar, una barra de iluminación ubicada en el inferior de la notebook que chorrea el espíritu gamer que el equipo posee.
Por otra parte, su construcción y diseño surge de la colaboración con BMW Designworks y esto se refleja en el toque futurista que el tratamiento sobre los materiales de construcción. Con un panel superior cubierto en aluminio cepillado y paneles inferior e interior en plástico y fibra de carbono con una textura que le otorga mucha personalidad. La utilización de fibra de carbono en el equipo también se agradece dado que lo dota de mayor durabilidad y resistencia.
Refiriéndonos únicamente a su faceta estética podríamos decir que la Scar III está pensada casi de forma exclusiva para el público gamer. Aunque por sus prestaciones de hardware (que ahondaremos a continuación) nada impide que la lleves a la oficina. Eso sí ¡No vas a pasar desapercibido para nada!.
Pantalla de altas prestaciones
Otro de los aspectos a destacar de este equipo es sin duda su pantalla. Un panel IPS de 15.6” con resolución 1080p (FHD) con una tasa de refresco de 240Hz y un tiempo de respuesta de 3ms. Además el panel de marca Sharp que posee el equipo cuenta con un brillo promedio de 284 nits y ángulos de visión de 89/89. Valores más que beneficiosos al momento de jugar.
El diseño del panel destaca también por sus biseles delgados en la parte superior y laterales, que elimina la web-cam como opción integrada pero favorece considerablemente tanto el tamaño del equipo como la experiencia de juego.
Además, la Scar III permite salida a monitores 4K en caso que deseemos contar con mayor resolución de imagen.
Una bestia debajo del capót
Sin lugar a dudas, toda la estética y diseño de esta Scar III viene además acompañada con una configuración acorde a su gama alta. Y si bien existen otra variantes de configuración, aquí nos centraremos en la unidad que pudimos testear.
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El equipo tiene nada menos que un procesador Intel I7 de novena generación y una placa gráfica RTX 2070 de 8GB de VRAM, entre otros. Esta configuración, lo convierte en un verdadero último modelo y su performance no es de sorprender que sea excelente.
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En el apartado gaming comprobamos que incluso en los settings más altos (high o ultra) títulos como: The Witcher 3, Far Cry New Dawn, Metro Exodus superaron facilmente en promedio los tan deseados 60fps y en los casos de Control o Shadow of The Tomb Raider pudimos disfrutar del Ray tracing de NVIDIA en todo su esplendor, con el consecuente descenso en la tasa de imágenes por segundo que se sitúa debajo de los 40fps haciendo uso de esta tecnología.
RTX sí, pero en su variante Max-Q
Esta claro que la performance de la Scar III es excelsa y que puede correr cada juego de última generación casi sin despeinarse. No obstante, es importante aclarar que aún contando con un diseño físico de su tarjeta gráfica idéntico a la gama RTX que vemos en ordenadores de escritorio, la portabilidad conlleva sacrificios. El modelo montado de GPU es del tipo Max-Q una gama de tarjetas especialmente diseñadas para equipos portátiles o de tamaño reducido que si bien no es inferior a sus hermanas mayores de escritorio si se encuentra reducida en cuanto a frecuencia.
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Mientras que la versión de escritorio de la RTX 2070 se ubica entre los 1410 MHz y los 1620 MHz en turbo boost. La versión Max-Q que posee la Scar III esta frecuencia se sitúa entre los 885MHz y los 1185MHz. Esta limitación impuesta al modelo portátil viene sujeta a que no contamos con la misma capacidad de refrigeración que en equipo de escritorio. Debido a esto NVIDIA se ve obligada de momento a reducir los relojes de su placa para esta notebook de manera que la potencia de diseño térmico (TPD por su sigla en inglés) no supere los 115W y comprometa la performance ni integridad del equipo.
Pese a esta limitación en comparación con una desktop, el contar con esta potencia en un equipo que es plenamente portátil es algo con lo que solo podíamos soñar tiempo atrás. A continuación el listado completo de especificaciones de la Scar III.
Especificaciones
- Modelo: G531GW
- Sistema Operativo: Windows 10 Pro
- Procesador: Intel Core i7-9750H
- Tarjeta Gráfica: NVIDIA GeForce RTX 2070 de 8GB GDDR6 VRAM
- Memoria: 16 GB DDR4 2666MHz SDRAM (soporta hasta 32 GB)
- Almacenamiento: M.2 NVMe PCIE 3.0 1TB SSD
- Pantalla: 15,6 pulgadas Full HD (1920×1080) IPS, 240Hz, 3ms.
- VR Ready: Sí
- Teclado: Backlit chiclet keyboard
- Audio: 4W*2 speakers with Smart AMP technology
- Puertos disponibles: 1 x Type C USB 3.2 (GEN2) 3 x Type A USB 3.2 (GEN1) 1 x HDMI 2.0b 1 x 3.5mm Audio Jack/ 1 x Audio Jack Mic-in (Combo Jack) 1 x RJ45 LAN Jack 1 x Keystone
- Wi-Fi / Bluetooth: Intel® 802.11ac (2×2) Gigabit Wi-Fi support Rangeboost technology / Bluetooth 5.0
- Tamaño: 360 x 275 x 24.9mm
- Peso: 2.57 kgs.
CONCLUSIÓN
Como conclusión, debemos destacar que tanto sus altas prestaciones de diseño como la posibilidad de utilizar la tecnología Ray tracing en un equipo totalmente portátil ponen a esta ASUS Rog Scar III en lo más alto del mercado para el consumidor gamer. Como único punto no tan positivo, debemos destacar su sistema de ventilación que pese a contar con un gran diseño se torna ruidoso en los momentos de mayor exigencia.
La ASUS Rog Scar III es sin duda una gran alternativa en la gama alta de equipos, tanto para los gamers exigentes como para jugadores competitivos que necesiten contar con un equipo que sea fácil de transportar, sin resignar por eso un diseño que realmente llame la atención.