Chelsea Manning fue liberada luego de pasar siete años en prisión por filtrar documentos confidenciales de Estados Unidos a Wikileaks. Te contamos quién es, qué hizo, y mucho más, en esta nota.
Chelsea Manning pasó siete años en la cárcel por filtrar miles de documentos diplomáticos y militares a Wikileaks. Ahora, aprovechando su libertad, Manning compartió sus primeras horas al aire libre en una cuenta de Instagram que creó hoy. El primer post fue una foto de la mesa de un restaurant. Al pie de la foto, escribió: “Lista para comer mi primera pizza caliente y grasosa”. La segunda foto del día, muestra, literalmente, sus primeros pasos con ropa de civil.
En realidad Manning tenía una sentencia en prisión hasta el 2045. Pero el ex presidente Barack Obama le conmutó la sentencia poco antes de dejar la Casa Blanca en enero de este año. Sin embargo, no fue bien recibido por el actual presidente Donald Trump:
El 26 de enero de este año, Trump dijo que Manning es un “traidor desagradecido”, y que nunca debería haber salido de prisión, ya que dijo que Obama fue un líder débil.
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¿Se acuerdan del escándalo de Wikileaks y los documentos sobre Irak en el año 2010? Manning cumplió un rol fundamental en esa filtración que tuvo en vilo al mundo.
Chelsea Manning en realidad se llamaba Bradley Manning. Creció en el estado de Oklahoma, EE.UU. y en Gales, Reino Unido. En el 2009 se alistó en el ejército para ayudar a pagar sus estudios universitarios. Fue formada como analista de inteligencia y enviada a Irak en el 2010. Ese año realizó la mayor filtración de la historia de documentos clasificados del gobierno de Estados Unidos.
En Irak tenía acceso a una computadora con información clasificada y comenzó a descargar cientos de archivos confidenciales. “Llegaba con un disco CD-RW etiquetado con algo como ‘Lady Gaga’ (…) borraba la música y grababa una carpeta comprimida. Nadie sospechó nada –contó Manning más tarde–. Escuchaba Telephone de Lady Gaga mientras extraía lo que era posiblemente el mayor vertido de datos de la historia de Estados Unidos”. A principios de 2010 envió la información a Julian Assange, y en abril, Wikileaks publicó el vídeo de un ataque estadounidense a civiles en Bagdad.
Manning le contó al hacker Adrian Lamo, con el que mantenía chats encriptados, que él fue el autor de la filtración de los archivos clasificados. Ese fue el error que le costó todos estos años en prisión. Lo primero que hizo Lamo fue contactar a los investigadores de las fuerzas armadas y al FBI. En un Starbucks cerca de su casa y les mostró los chats que sirvieron para condenarlo. El 30 de julio de 2013, Manning fue condenada a 35 años de prisión.
Un día después de recibir su sentencia, develó su verdadera identidad sexual: “Soy una mujer. Por la forma en que me siento y me sentí desde la infancia, quiero comenzar la terapia hormonal tan pronto como sea posible. Espero que me apoyen en esta transición”, declaró. En 2015 se aprobó que Manning iniciara un tratamiento hormonal para comenzar su transformación. Fue la primera militar en lograr el derecho de recibir terapia de hormonas en prisión.
Chelsea Manning fue una activista en derechos LGBT . En el 2016 se sometió a una huelga de hambre para que le concedieran una cirugía de cambio de sexo, que finalmente fue aprobada.
Días antes de salir en libertad, declaró: “Por primera vez, puedo ver un futuro para mi como Chelsea- Puedo imaginarme sobreviviendo como la persona que soy y finalmente salir al mundo mundo. La libertad solía ser algo con lo que soñaba pero que nunca pude permitirme imaginar. Ahora, la libertad es algo que podré experimentar con amigos y con la gente que quiero luego de siete años de barras y cemento, de períodos solitarios de confinamiento, y el cuidado de mi salud y autonomía restringidos. Incluso rutinarios cortes de pelo forzados. Agradezco a la gente que me mantuvo con vida, al Presidente Obama, a mi equipo legal y a todos los que me apoyaron”.