Una extraña nueva tecnología para VR nos deja experimentar como sería tener arañas caminando por nuestros labios. Te contamos toda la info ¡acá!
Una de las mejores incorporaciones en el mundo de la tecnología fue la llegada del VR, dispositivos que nos dejan experimentar nuestros distintos juegos de una manera muy diferente. Esta tecnología, que crece lentamente entre los usuarios por su alto ticket, apareció para que el jugador mejore la experiencia inmersiva, pero un grupo de científicos desarrolló una nueva tecnología que va un poco más allá.
Este grupo de científicos, que son integrantes del Grupo de interfaces futuras de la Universidad de Carnegie Mellon, logró una gran innovación: ahora con el VR se puede experimentar a través de nuestra cara y boca, además de por los ojos. La experiencia que ellos proponen como demostración, de todas maneras, es bastante particular y probablemente muchos no quieran experimentarla. Con el demo, el grupo nos deja disfrutar de esta nueva tecnología por medio de arañas.
Lo que hicieron Vivian Shen, Craig Shultz y Chris Harrison, integrantes del Grupo de Interfaces, fue modificar un Oculus Quest 2 estandar y agregarle una serie de transductores ultrasónicos. Estos generan energía ultrasónica que se dirige directamente a los labios del usuario. Gracias a esto, quien utiliza en VR puede sentir a través de vibraciones o pulsaciones erráticas en los labios y rostro. Con esta nueva tecnología tenemos la primer experiencia de Realidad Aumentada que involucra todo nuestro rostro.
El demo que presentaron los desarrolladores de esta tecnología para demostrar como funciona el nuevo VR incluía arañas. La prueba consistía en ponerse el Oculus y caminar por un bosque encantado, lleno de telas de arañas y sus respectivas creadoras, las arañas. Cuando una de ellas tocaba o caía en el rostro del jugador, el Oculus le enviaba “impulsos aleatorios que simulan un insecto caminando alrededor de la cara”.
Pero esto no termina ahí, ya que el demo terminaba con un final boss que era una araña gigante. Esta araña goteaba un espeluznante veneno verde que el usuario podía sentir. Cada vez que una salpicadura del veneno cae en el rostro del jugador, se activan los mismos transductores para que el usuario tenga la experiencia completa.
A pesar de que este escenario suena bastante interesante, no todos los demos giraban en torno a arañas. Otro de los escenarios era un poco más tranquilo y recreaba un colegio. En este, había una fuente de donde se podía tomar agua, un cuarto de descanso donde se podía fumar y una carrera de motos donde el jugador puede sentir la brisa en sus labios. Por suerte, para entender un poco más como funciona el dispositivo tenemos un vídeo de demostración donde una de las encargadas del proyecto pone a prueba esta adición al Oculus.
Lo que se puede destacar es que estamos frente a una innovación bastante interesante. Que se incorpore a un VR otros sentidos además del de la vista es un avance bastante favorecedor para las nuevas tecnologías. Y quien sabe, por ahi en un futuro no muy lejano podremos también disfrutar de aromas mientras jugamos a nuestros videojuegos favoritos en VR. [embedyt] https://www.youtube.com/watch?v=z826-dFSG2c[/embedyt]