Te traemos una lista con los 10 mejores arcades de carrera, que son imprescindibles y que marcaron un hito en sus tiempos ¡Más info acá!
No es necesario ser fan de una disciplina o deporte para que te gusten cierto tipo de juegos, como pasa con los de carrera. La adrenalina que sentís al estar al volante de un bólido capaz de llegar a 250 km en menos de 10 segundos es incomparable, aún cuando se trate de un vehículo pixelado, una nave espacial o un monstruo de otra dimensión.
Los salones de arcades supieron desde sus comienzos llenarse de videojuegos cuya temática son los autos, motos o cualquier otra cosa que tenga ruedas. Es casi universal esa fascinación de poder conducir peligrosamente sin que nuestra vida corra peligro. Es por eso que el equipo de “arcadeólogos” de Cultura Geek revisó algunos de los mejores exponentes de este género que aparecieron en los 80s y que hicieron que algunos de nosotros se deje fortunas en fichas. Ajústense los cinturones que partimos.
Moto Race USA
Tras su apariencia simple se esconde un muy divertido juego que te lleva a recorrer en una moto las peligrosas rutas norteamericanas. Uno de los primeros juegos en usar dos perspectivas distintas durante la carrera. El típico juego que te puede salvar para matar 10 minutos de tiempo libre.
Buggy Boy
Un juego muy raro de encontrar en la Argentina en su versión deluxe porque tenía nada menos que 3 (si, TRES) pantallas en 1985 y eso lo hace terriblemente atractivo, además de contar con unos gráficos muy avanzados para la época y una jugabilidad muy interesante. Lo bueno es que hoy en un emulador como el MAME es igual de divertido.
Spy Hunter
Con sólo escuchar la melodía de Peter Gunn compuesta por Henry Mancini, este bello juego nos lleva a emular las aventuras de un espía que conduce un auto plagado de “gadgets” que le permiten combatir a los malos que encontraremos en el camino. Por eso, este juego es una mezcla de conducción y acción, un pack más que apto para divertirnos.
Road Fighter
Si bien tiene el “Fighter” en el título, este adictivo arcade no tiene nada de combate y sí mucho de carrera contra el tiempo y nuestros contrincantes. Ellos harán todo lo posible para taparnos el camino y hacernos perder preciosos segundos para llegar a la siguiente etapa. Muchos lo habrán conocido en su versión de NES (el famoso “family” que muchos tuvieron), pero su original es de los arcades.
Hard Drivin’
Cuando los videojuegos de conducción todavía soñaban con las tres dimensiones, Atari se animó y lanzó este tosco pero avanzado juego que en su cabinet original poseía hasta una llave de arranque para empezar el juego, caja de cambios manual y hasta un embrague. Hoy quizás no se sostiene bien si consideramos en cuenta que un par de años luego vendrían joyas como Daytona. Sin embargo, si tenemos en cuenta la época en la que salió, sin duda merece ser mencionado.
Championship Sprint
Gracias a su vista casi cenital, este simple pero divertido juego permitía enfrentarse con hasta 3 jugadores en un mismo circuito. Esto permitía recordar las épocas en las que eran furor las pistas “Scalextric”. A pesar de ser pequeños, los circuitos permiten generar todo tipo de situaciones cómicas y adrenalínicas gracias a la velocidad con la que se mueven los autitos.
Chase HQ
Taito decidió sumar a la velocidad la persecución de delincuentes, y generó un apasionante juego en el que recorremos las rutas a toda velocidad en nombre de la ley. Caos, tiros y destrucción al por mayor, Chase HQ nos hace sentir como todo un as del volante y un justiciero a la vez.
Pole Position
El primer videojuego de carreras de la historia que intenta ser “fotorrealista” y que marcó las pautas del género por años. A pesar de tener detalles como que tu auto explota con solo rozar a los rivales, las máquinas de Pole Position atrajeron a miles de jugadores y permitieron a muchos estar más cerca del sueño de manejar un Formula 1. Un clásico.
Hang – On
Una vez que Sega descubrió la tecnología de escalado de sprites, no paró de crear maravilla tras maravilla y Hang On es una de esas. La versión deluxe del juego permite a los jugadores sentarse en una moto de tamaño real y conducir al inclinarse con todo el cuerpo, lo que era un imán para todo el que tuviera una ficha en la mano. Si a eso le sumamos una jugabilidad impecable y una música increíble, todo está servido para el asombro.
Out Run
Nuevamente, Sega hace lo que mejor sabía hacer: juegos espectaculares y originales. Out Run representa uno de los picos creativos de la empresa que luego crearía a Sonic e introduce tantas novedades en un solo juego, que no sorprende que sea mencionado siempre en las listas de los mejores. La mezcla de un soundtrack explosivo, gráficos soberbios y la posibilidad de elegir diferentes rutas cada vez que jugás, Out Run sin duda merece su lugar como el mejor juego de carrera de los 80.