Día histórico en el mundo de las cripto. Ahora que el Merge de Ethereum es un hecho, este cambio a un nuevo modelo operativo más ecológico ayudará a que la plataforma consuma un 99% menos de energía. Enterate los detalles en ¡esta nota!
Día importante en el mundo de las criptomonedas. El famoso evento llamado The Merge, una actualización específica de Ethereum que la hará más ecológica y que la ayudará a consumir un 99% menos de energía, ya es un hecho. Además de ser una buena noticia para el medio ambiente, este proceso también busca hacer que la red sea más segura y escalable. Se viene una nueva era para el token digital.
Ether (ETH) es la segunda criptomoneda más popular del mundo y, gracias a The Merge o la fusión, se convirtió en un nuevo modelo operativo más ecológico, ya que hará que sus emisiones de carbono se reduzcan un 99%. Para que se den una idea, antes de esta actualización (que más abajo les vamos a explicar), la “minería” de esa moneda consumía tanta electricidad como los Países Bajos en junio, según había explicado la Fundación Ethereum.
The Merge se viene planeando básicamente desde que la criptomoneda se lanzó en 2014, según informó Vitalik Buterin, cofundador de Ethereum. Sin embargo, se pospuso varias veces por la complejidad técnica que supone. Ahora que este nuevo modelo operativo ya es un hecho, la minería proveniente del sistema Proof-of-Work (PoW) quedó atrás y pasaron a Proof-of-Stake (PoS). ¿Qué es eso? Sistemas, a veces llamados algoritmos de consenso, que sirven para proteger a la red de posibles ataques.
Partamos de la base. Las criptomonedas son un sistema de moneda digital en el que las personas realizan pagos directos en línea entre sí y que se administran con una “cadena de bloques” (blockchain), una red global descentralizada de computadoras de alta potencia que permite crear (o minar) divisas digitales. Hasta ahora usaban el modelo conocido como Proof of Work.
En el PoW, los “mineros” deben probar que tienen computadoras poderosas y energía eléctrica para participar de la red. Su objetivo es resolver códigos criptográficos para colaborar con la blockchain mediante la validación de transacciones y, gracias este trabajo, son recompensados con nuevas monedas. Una vez que se resuelve la operación, otros mineros lo verifican y se confirma la transacción. Para este proceso se necesita mucho tiempo de computadoras, por lo tanto, bastante uso de electricidad.
Gracias a The Merge, el sistema PoW se fusionará con una copia de carbón llamada Beacon Chain (cadena de baliza). Y es acá donde aparece un nuevo sistema de codificación de las criptomonedas del sistema Ethereum: el PoS, donde los “mineros” son reemplazados por una cantidad menor de “validadores” de la transacción. Ahora se deben bloquear ETH para validar transacciones y así recibir una recompensa.
Este sistema reduce mucho la cantidad de computadoras necesarias para mantener la cadena de bloques, las monedas entregadas como recompensa y la cantidad total de divisas existentes. Además, con el PoS se pueden usar computadoras portátiles y de escritorio, y se dejan de lado las GPU. Para que se den una idea, pasar a PoS reducirá el consumo de energía en alrededor de 112 teravatios hora por año a 0,01 teravatios hora por año.
Así que, si bien Ethereum sale muy beneficiado con esta fusión, la reducción de electricidad ayuda más que nada al planeta. Como les decíamos arriba, The Merge es excelente para el medio ambiente porque la validación de PoS utiliza aproximadamente un 99% menos de energía que la validación de PoW.
Tim Beiko, un desarrollador de la Fundación Ethereum que desempeñó un papel clave en la coordinación de la actualización, le dijo a CoinDesk: “Creo que The Merge realmente puede hacer que las personas interesadas en Ethereum, pero escépticas sobre los impactos ambientales, vengan y experimenten con él”.
Los próximos días serán clave para medir el estado de la actualización posterior a la red Ethereum. Detrás de escena, los desarrolladores monitorearán métricas, como la tasa de participación de los validadores, para determinar cómo van las cosas. Los codificadores le dicen a CNBC que, en un mundo ideal, los usuarios no se darían cuenta de la actualización. “Si todo sale a la perfección, el usuario final no notaría la diferencia”, dijo Sean Anderson de Sigma Prime. “Si alguien que está tratando de realizar transacciones en Ethereum no se da cuenta, entonces fue sencillo”.
Ahora que Ethereum consume muchísima menos energía, varias personas podrían interesarse en usar Ether e incluso convertirla en la criptomoneda dominante, reemplazando a los Bitcoin. ¿Quién sabe? Tendremos que ver cómo evoluciona esta nueva era.