¡Pare de sufrir! The Witcher 3, además de ser un gran juego, es super desafiante, especialmente en las dificultades altas. Acá te damos consejos para jugar sin frustrarte.
Ahora que ya pasaron casi dos semanas del lanzamiento inicial de The Witcher 3, nos quedó una cosa muy en clara: The Witcher 3 es un juegazo, como te contamos en nuestro review de radio y en web, pero es super desafiante. Olvidate de los RPG modernos, con marcadores de quests y dificultad suave, The Witcher 3 puede y va a complicarte la vida – en todas las dificultades. Eso sí, esto no ocurre porque el juego esté mal hecho, sino porque los Skyrim y Dragon Age nos han malacostumbrado a jugar sin prestar mucha atención, salteando diálogos, y cayendo en patrones de hacer siempre lo mismo porque queremos las recompensas de la quest. The Witcher 3 te va a pedir que pienses lo que hacés, porque confiar en sólo un método va a hacer que Geralt termine muerto bastante seguido … y considerando lo largos que son los tiempos de carga (al menos en PS4), lo ideal es que esto pase lo menos posible.
Geralt no es un dios de RPG o un ser omnipotente, sino un tipo inteligente y tenaz que es capaz de sobreponerse a todas y cada una de las situaciones que surgen en el juego usando una enorme variedad de herramientas. Si nunca jugaste un juego de The Witcher antes, la dificultad Story And Sword está buena por ofrecer una curva de dificultad suave pero con desafío, mientras que Blood And Broken Bones te hará sentir como un verdadero Witcher, usando pociones, aceites, y herramientas además de tus espadas. Finalmente, Death March es para jugadores experimentados, y cada batalla va a requerir que analices todas y cada una de tus decisiones en vez de ir espada en mano sin considerar las consecuencias. El primer consejo que te damos es ese: elegí la dificultad acorde a tu estilo de juego, pero acordate que si te equivocas, la podés cambiar en cualquier momento para incrementarla o para bajarla. Esto puede sonar a consejo tonto, pero las dificultades en este game marcan una diferencia enorme.
Usá pociones: en las dificultades más bajas Geralt puede recuperar energía meditando – en las dificultades altas no, y sólo podés depender de la comida (que te da el status de regeneración por unos segundos) o las pociones, y si no estás cerca de pueblos o en el exterior, la comida empieza a escasear, especialmente cuando exploras ruinas o cuevas. Por eso es vital que Geralt aprenda a fabricar pociones, en especial “Swallow”, que es la que recupera energía. Si te falta algún ingrediente para la poción, visitá a la herbalista más cercana que tengas, pero adquirir esta poción es de vital importancia. Las demás pociones también son útiles, en especial aquellas que incrementan el daño. Si matás a los enemigos antes de que te toquen, no vas a tener que curarte tanto.
Usá signos: Geralt no maneja magia como las hechiceras del juego, pero sí signos que son hechizos menores y sirven más que nada para darte respiros en el medio del combate. Andá olvidándote de liquidar enemigos sólo con magia. o de causar buen daño, esto es todo apoyo, pero puede ser la diferencia entre la vida y la muerte. Por eso, nuestros signos preferidos son Quen, que produce un escudo, y Axii, que marea al enemigo y lo deja abierto para un ataque. Además, Axii también se puede usar fuera del campo de batalla en varias conversaciones así que no es mala idea ponerle un par de puntos de mejora encima.
Lee el bestiario: cuando aparece un tipo de enemigo nuevo o leas un libro acerca de algunas criaturas, Geralt agregará una entrada al bestiario, que se puede acceder en todo momento. En estos apartados, los jugadores podrán conocer a las criaturas, sus debilidades, y cómo atacarlas para que la batalla marche sin sorpresas. Con esto, vas a conocer si una criatura es débil a algún signo o aceite, y poder explotar esto para derrotarla.
Usá las espadas correctas: si ves sólo los números, no queda muy en claro por qué Geralt tiene dos espadas: la de plata debería ser mucho mejor. Lo cierto es que esto no es tan así, y cada espada tiene una función diferente: mientras que la de plata es más efectiva en criaturas mágicas, la de acero funciona mejor en oponentes humanos y criaturas que no son mágicas (perros, lobos, osos, etc.) – es vital que sepas diferenciarlas y usar la espada apropiada. El 98% de las veces, Geralt va a sacar la espada correcta automáticamente, pero si te acostumbraste a andar con la espada desenfundada, es un detalle para que tengas en cuenta.
Usá aceites y bombas: los aceites se utilizan antes del combate, y harán que la espada de plata de Geralt tenga alguna habilidad especial durante la pelea (por ejemplo, doble daño contra fantasmas). Lee el bestiario, y elegí el aceite apropiado. Además, tené un par de bombas a mano por si encontrás nidos de monstruos o por si necesitas causar mucho daño en poco tiempo.
Usá bien tus puntos de habilidad: confiar en sólo un tipo de ataque va a hacer que Geralt muera. Por eso, cuando ganes puntos de habilidad al subir de nivel fijate bien donde usarlos, y no los pongas todos en la misma categoría: es en tu mejor interés que preserves un arsenal variado y efectivo de signos, pociones y ataques con espada más que nada. También, si jugás en dificultades altas activá la habilidad “Sun and Stars”, cosa de que puedas recuperar energía fuera del combate.
Hacé sidequests y completá contratos: similar a lo que decíamos de explorar el mapa y marcadores. Completar contratos te hará ganar dinero para comprar, mejorar o modificar tu inventario, y quests como las carreras de caballos harán que Roach tenga más espacio para llevar tus items. Vas a ganar dinero y experiencia, y las dos cosas escasean así que no las desperdicies.
Guardá tus items en Roach. en The Witcher 3 varias veces vas a necesitar una armadura vieja para poder construir una armadura nueva. Por esto, nunca vendas o tires tu equipo inicial, lo vas a terminar extrañando y necesitando para tener acceso a las mejores armaduras y espadas del juego. Sin embargo, el equipo tiene su peso, y por eso es que tenés que mejorar las monturas y equipamiento de tu caballo, para que te permita guardar más cosas sobre este.
Bloqueá contra humanos, esquivá contra bestias: Esta es bastante básica, pero vale la pena tenerla en cuenta. Si tu oponente es humano y usa un arma, tratá de contrarrestar su golpe y contraatacar en la abertura que queda. Si tu oponente es una criatura, olvidate, esquivá el golpe, y cuando pase de largo cortalo por atrás. Ojo, dijimos esquivar, no rodar, y salvo que pelees con criaturas muy grandes, no deberías rodar en ningún momento para no perderte de las aperturas para los contraataques.
Esperamos que estos consejos te sirvan, especialmente si sos un fan de los más cebados que juega en Death March, o pensas coleccionar los trofeos y logros. Es importantísimo que tengas en cuenta que subir de nivel marca una diferencia, y si una batalla parece imposible, lo mejor es que bajes un cambio, hagas otra cosa y vuelvas cuando Geralt tenga mejores stats y habilidades. No te frustres, el juego está bien hecho y no hay razón para que la pases mal en ninguna pelea – no hay ninguna secuencia que sea imposible. Con todo esto dicho, te adelantamos que el juego empieza complicado, pero con práctica, tenacidad e inteligencia rápidamente vas a encontrar tu estilo y poder disfrutar de una de las aventuras más épicas del mundo de los video juegos. Cuando ganes el game acordate de nosotros, y mandanos un saludito.