Theatrhythm Final Bar Line trae la saga de ritmo con música de Final Fantasy a las consolas en un juego de ritmo frenético y espectacular. Te contamos qué esperar en su versión de Switch, ¡en esta nota!
Theatrhythm Final Bar Line es el más reciente videojuego de ritmo de Square Enix, y propone un recorrido entero por la saga Final Fantasy con canciones de cada uno de sus 15 juegos, sus precuelas, secuelas y spin-offs. Este título es la tercer entrega en la saga Theathrythm, que ahora llega por primera vez a las consolas hogareñas después de estar confinado a la 3DS en sus ediciones anteriores. Así, una vez más, podremos tomar control de personajes de toda la serie para escuchar música y seguir el ritmo.
Siga el baile, siga el baile
Theathrythm Final Bar Line es un juego de ritmo y de rol a la vez. El título no tiene historia, explicación, ni nada sino que va a los bifes derecho: estás acá para oír temas de Final Fantasy y tocar botones para seguir el ritmo en pantalla, cual si fuera Project Diva o Persona Dancing. Pero, la gracia y el diferencial es que vas a poder elegir a tus héroes de cada título que vayas desbloqueando, subirlos de nivel, y aprender más habilidades. La cuestión es que no alcanza solo con “pasar” los temas: también tenés que tener bonos apropiados y nivel de personaje para poder enfrentarte a los monstruos que aparecen mientras “tocás,” y mientras mejor sigas el ritmo, mejor saldrá el combate.
Tras una exitosa demo donde se puede probar el sistema de juego y pasar por varios temas de títulos clásicos pudimos agarrar el juego completo en Switch. Lo primero que te va a sorprender de este paquete de canciones es que hay 385 canciones solo en el juego base, con la promesa de que 27 más se sumarán en forma de DLC. Esto es muchísimo más que las versiones previas que incluían apenas 3 o 4 canciones por título – algunos como FF14 con su DLC o FF7 y sus precuelas y secuelas tienen casi 40 solamente de esos juegos, que es una locura. Si tenés un tema que te encante, muy posiblemente esté incluido.
Las versiones incluidas, salvo algún remix especial, son las de sonido original. Esto es un mimo a la nostalgia (escuchar Rebel Army de FF2 en gloriosos 8 bits es espectacular) pero, si no los conoces ni sabés de donde salen, capaz te parezca un exceso el respeto al material base. El tema es que cada canción está acompañada de un fondo donde vemos a nuestros héroes elegidos desplazarse de derecha a izquierda en el mapa mientras se enfrentan a bestias, criaturas y bosses que de algún modo están relacionados con lo que suena.
Y todo el pueblo cantó
La cuestión es que no necesariamente tenés que usar personajes del juego en cuestión. Por ejemplo, si te gusta mucho Cloud, un personaje pensado para hacer daño, lo podes llevar a todos los juegos y usarlo en nivel 99 para pasar la canción que quieras. El tema es que cada personaje tiene un set de habilidades único y a veces para completar un nivel vas a tener que usar a ciertos personajes con builds específicos si querés desbloquear todos los coleccionables. Es un juego que, si te gusta, te va a dar decenas de horas de contenido mientras machacas botones.
Como Final Fantasy tiene 35 años de historia y no todos los héroes tienen la misma estética, para Theathrythm Final Bar Line se eligió representarlos a todos con un estilo de arte único donde se ven como muñecos de trapo. La excepción a esta regla son ciertos niveles más modernos donde en vez de progresar matando bichitos ves la cinemática en cuestión de fondo, en gloriosos gráficos next-gen, mientras la barra con el ritmo progresa de forma horizontal en vez de vertical.
Tiempo de vals
Theathrythm Final Bar Line cuenta con tres modos de juego. El primero es el equivalente a un modo campaña, donde vas desbloqueando diferentes juegos, superando los temas y reclutando personajes mientras cumplís misiones. El segundo es básicamente un modo free play, donde se van sumando canciones a medida que juegues y donde podés jugar por puntos. El tercer modo, que es divertido pero superfluo, es un multiplayer donde muy a lo Tetris 99 vas tocando tu tema y consiguiendo poderes para tirarle al otro jugador y hacer que los controles se le aceleren, que se le bloquee la pantalla, y más cosa que pierda. Eso sí, vas a tener que desbloquear cada tema antes de poder ir ahí – como en el juego mismo, todo va a su ritmo.
En conclusión
Final Fantasy es una de las sagas más queridas del universo de los videojuegos, un tótem de más de 35 años de historias épicas. Sus tramas emocionan, sus personajes fanatizan, su arte enloquece y su jugabilidad te hace volver para pedir más. Sin embargo (subjetivamente hablando), lo que realmente hace especial a la saga y su mejor aspecto es la música. El trabajo de compositores como Nobuo Uematsu, Masayoshi Soken o Yoko Shimomura, por solo nombrar un par, es la clase de arte que le cambia la vida a las personas. Theathrythm Final Bar Line es, más que un juego, una celebración del trabajo de algunos de los compositores más importantes de Japón. Como juego de ritmo, está muy bueno… pero como artefacto sobre la música de la saga es fundamental.
FECHA DE LANZAMIENTO | 16 de Febero de 2023 |
DESARROLLADOR | Square Enix |
DISTRIBUIDOR | Square Enix |
PLATAFORMAS | PS4, Switch |