El Galaxy Z Fold 3 de Samsung es la tercera edición de una idea que intenta cambiar la manera de usar un smartphone. Después de usarlo un tiempo, te decimos qué cosas extrañamos al volver a usar un dispositivo tradicional y a qué cosas nos costó acostumbrarnos cuando lo tuvimos.
El Samsung Galaxy Z Fold 3 ya se vende en algunas partes del mundo y está a días de llegar a la Argentina. Si bien no tiene precio confirmado, se cree que se podrá conseguir a un 15% o 20% menos que en los EE.UU., aunque no deja de ser uno de los equipos más costosos. En Cultura Geek tuvimos la suerte de probarlo unas semanas y usarlo a diario, para ver si con los teléfonos que se doblan estamos realmente frente al futuro de los smartphones o es solo una moda pasajera.
El Galaxy Z Fold 3 vendrá a la Argentina con 256GB de almacenamiento (hay versiones de 512GB), tendrá el más potente procesador de Qualcomm el Snapdragon 888 con 12GB de RAM. Tendrá 4400mAh de batería (para más de 1 día), puerto USB-C, NFC, carga a 25 watts y wireless a 11watts. Pero… ¿Cuáles cosas son las que realmente lo diferencian de un equipo tradicional?
La pantalla interna, el tablet killer
La pantalla interna plegable AMOLED 2X HD + de 7.6 pulgadas del Galaxy Fold 3 se ve bien, es cómoda y se siente enorme a la hora de usar las redes sociales o jugar nuestro título favorito. Con una tasa de refresco variable, el display de este dispositivo se adapta al contenido para llegar hasta a los 120Hz y 1200 nits. Igual a lo que presentó Apple con iPhone 13 Pro, pero en este caso se dobla a la mitad y ofrece muchísimo más campo de visión. Es el verdadero distintivo del que no se puede volver. Usar el teléfono tradicional con la parte delantera para responder mensajes o ver cosas pasajeras, y expandir a la pantalla interna a lo tablet para ver contenidos multimedia, lectura y juegos de manera más cómoda.
Todo esto se ve con la pantalla desplegada. Ideal para ver contenidos.
Para aquellos que son fan del S-Pen, este nuevo Galaxy Fold 3 es compatible con el S Pen Fold Edition, diseñado exclusivamente para los dispositivos plegables de Samsung, eso si: se vende por separado. Cabe decir que no es tan práctico para el uso diario, porque podés olvidarlo o perderlo si no usás la funda específica que tenga un lugarcito para guardarlo. Pero para aquellos que gustan de dibujar en la tablet o escribir a mano, el diseño del Fold con su pantalla interna desplegable se presta para la creatividad.
La pantalla externa AMOLED 2X de 6.2 pulgadas también alcanza la tasa de refresco de 120Hz. Esta frecuencia hace que cerrado se pueda usar como un smartphone tradicional con la sensación de ser un poco más finito y con un poco de sobre peso. Pero nos llevará un par de días acostumbrarnos.
El fin de sacarse fotos estilo “selfie” con la peor cámara del equipo
Si sos como nosotros, quizás te pasó que te compraste un equipo con una mega cámara, pero como viajás o no tenés a alguien que te saque fotos, usás la cámara frontal (que es siempre de peor calidad que la trasera). Como resultado tenés imágenes de una calidad muy inferior. Esto con el sistema plegable se terminó, ahora solo podés abrir el Galaxy Fold 3 y sacarte todas las fotos con las lentes principales, obtener una mejor calidad y con el extra de que podés con un simple click usar la pantalla frontal como monitor de la foto que te sacás.
Si igualmente querés seguir a la vieja escuela y usar la selfie cam, podés optar por la lente que está perforada en la pantalla externa, que es de 10 MP, f/2.2, 26mm (wide), 1/3″, 1.22µm, que rinde como una selfie cam tradicional.
El efecto “WOW”
Si hay algo indiscutible en el Galaxy Fold es que es un teléfono que, donde sea que vayas, va a generar miradas. Si bien el iPhone es el smartphone que se compra por status de marca, en este caso Samsung apela a la antigua atracción de generar ese efecto “WOW” por la innovación y el futurismo.
Si hace 6 años te decíamos que ibas a poder comprar en cuotas un equipo que tenía una pantalla flexible que se doblaba a la mitad, parecía algo de ciencia ficción. Esto genera miradas, temas de conversación, y por sobre todo, esa sensación que compartimos todos los que lo usamos, ese feeling de tener en la mano algo que realmente se siente del futuro en un mundo de smartphones que se apegan a hacer un pequeño upgrade de un equipo que salió a la venta hace 3 años (hola iPhone 13🤗). Eso si, tené siempre en cuenta que donde sea vayas vas a generar esas miradas, porque no es un dispositivo “subte / bondi / tren friendly”, por lo menos en nuestro país.
El modo “laptop”
Es realmente útil usar el equipo en L, como si fuese una laptop. En nuestro caso, pudimos hacer charlas por Zoom desde el teléfono sin tener que usar un stand, como así también ver videos en Youtube o Twitch mientras tenemos el WhatsApp abierto en la parte de abajo. Esto también es práctico para el trabajo diario, apoyarlo donde quieras. Inclusive se puede editar a dos pantallas, dividir las aplicaciones como nos guste para usar las partes dividas con multitasking. Lleva un poco de tiempo adaptarse a esto y aprender a manejar tantas opciones, pero una vez que se le saca provecho es difícil volver a trabajar de la manera “tradicional”.
La cámara selfie “invisible”
Otro de los puntos fuertes de la innovación de este equipo está en la cámara selfie de la pantalla interna (4 MP, f/1.8, 2.0µm). Literalmente no se ve cuando usamos la pantalla de manera regular. Esto se debe a una tecnología que oculta la lente detrás de pixeles iluminados, es por eso que no vemos la perforación en donde esta el sensor frontal. Si mirás muuuuuy detenidamente lo vas a encontrar, pero la idea y su función es que no tengamos un agujero negro que nos quite pixeles de la imagen, sino algo que pasa de largo y mejora la experiencia en videos o games.
Foto tomada con la cámara selfie invisible, que deja ver algo de ruido en algunas zonas.
Las fotos que sacás con esta lente no son mejores que las fotos que sacas con una selfie cam tradicional, pero como te contamos antes, las “selfies” te las vas a sacar con la cámara principal del equipo y no con la lente interna. Esta sirve para videollamadas y algún que otro detalle, pero no para las fotos clásicas.
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El tamaño en el bolsillo
Una de las preocupaciones es la incomodidad de llevar en el bolsillo un equipo que es el doble de ancho que uno normal. Como se puede ver en las fotos de abajo, comparamos el equipo cerrado y abierto con un S21 Ultra y si bien se ven diferencias, puede no ser algo realmente molesto. El equipo cerrado mide hasta 16mm de ancho en la parte más alta de su lomo, (CERRADO: 158.2 x 67.1 x 14.4-16 mm) y abierto solo 6.4 mm. Esto en comparación es un poco más del doble de un S21 Ultra, que tiene 6.8mm.
Pero la gran diferencia puede estar en el peso, ya que es 50 gramos más pesado, por lo que llega a los 271g. Esta distinción va a depender mucho de como usás vos los equipos.
¿Es algo frágil?
El miedo a romperlo siempre va a estar (¡Siempre con funda!) pero que se caiga al agua es algo que quedó atrás en esta tercera edición del dispositivo plegable de Samsung. Ahora se siente mas sólido, y sobre todo, se agregó la certificación IPX8 que permite que sea sumergible hasta 1,5 mts durante 30 minutos, lo que lo hace más versátil y ya deja de ser esa pieza ultra delicada que eran las versiones anteriores. El equipo además tiene la parte trasera y delantera con el resistente vidrio Gorilla Glass Victus y marco de aluminio. Parece magia negra que no perjudique el agua el complejo sistema de bisagras que tantos problemas trajo en su diseño inicial.
El set de cámaras no es el del S21 ultra
Acá es donde sentimos que tendrían que haberle puesto todo (además de lo que nos enoja que copien a Apple en lo peor, que venga sin cargador en la caja). Pero en este caso, el Z Fold 3 viene con un muy buen set de tres lentes (12 MP, f/1.8, 26mm wide, 1/1.76″, 1.8µm, Dual Pixel PDAF, OIS – 12 MP, f/2.4, 52mm telephoto, 1/3.6″, 1.0µm, PDAF, OIS, 2x optical zoom – 12 MP, f/2.2, 123˚, 12mm ultrawide, 1.12µm), pero no es lo mejor del mercado como el del S21 Ultra.
Si pagamos muchísimo dinero por tener lo último en innovación, el Fold tendría que tener lo mejor posible. Dicho esto, las cámaras rinden con creces a la hora de tomar fotografías y se mantienen como lentes de un equipo premium. Sirven para tomar fotos semi profesionales, con buen rendimiento en poca luz y con un muy buen enfoque. Pero si queremos lo último de la tecnología como es el Fold, queremos lo mejor posible, aunque sea dentro del portfolio de lentes del mismo Samsung.
En cuanto al video el equipo graba a 4K@60fps, 1080p@60/240fps (gyro-EIS), 720p@960fps (gyro-EIS) y con HDR10+, lo que le da un muy bien nivel técnico en filmación.
Precio y disponibilidad en Argentina
Se cree que llegará para mediados de octubre y ya se puede hacer el aviso de intención de compra en la web de Samsung. El precio no está confirmado pero se espera que a cambio actual, esté a un 15 o 20% menos que en los Estados Unidos, arriba de los 200 mil pesos. También habrá como siempre, la posibilidad de obtener un e-Voucher para canjear con otros productos de la línea como cargadores, relojes y auriculares, que se anunciarán a la brevedad.
ESPECIFICACIONES TÉCNICAS:
- Dimensiones: cerrado – 158.2 x 67.1 x 14.4-16 mm. Abierto: 128,1 x 158,2 x 6,4 mm
- Peso: 271 gr
- RAM: 12GB
- Almacenamiento: 256GB o 512GB
- Procesador: Qualcomm el Snapdragon 888
- Pantalla exterior: AMOLED 2X de 6.2, 120Hz
- Pantalla interior: AMOLED 2X HD + de 7.6, 120Hz
- Cámara frontal: 10 MP, f/2.2, 26mm (wide), 1/3″, 1.22µm
- Cámarastraseras: –12 MP, f/1.8, 26mm wide, 1/1.76″, 1.8µm, Dual Pixel PDAF, OIS – 12 MP, f/2.4, 52mm telephoto, 1/3.6″, 1.0µm, PDAF, OIS, 2x optical zoom – 12 MP, f/2.2, 123˚, 12mm ultrawide, 1.12µm
- Cámara interior: 4 MP, f/1.8, 2.0µm
- Sonido: Altavoces estéreo Dolby Atmos
- Sistema Operativo: Android 11
- Colores: Phantom Black, Phantom Green y Phantom Silver
- Precio: no confirmado