Uno de los grandes problemas del futuro, es la Energía y la manera de conseguirla. Un grupo de científicos lograron crear gasolina desde la famosa Escherichia coli, la bacteria que produce diarrea.
Aplicando técnicas de biología sintética, un grupo de especialistas coreanos, crearon el primer combustible que no necesitó petróleo, ni ningún tipo de combustible fósil. La bacteria utilizada, vive en el intestino de las personas, en las heces y es la principal causante de la diarrea. Pero a partir de este descubrimiento, su fama empezará a cambiar.
Según un artículo publicado en la revista especializada Nature, esta bio-gasolina, podría ser considerada uno de lo hallazgos más importantes del siglo XXI, dado que podría acabar con la dependencia del llamado oro negro, dado que implicaría poder utilizar una nueva forma de energía para los motores, sin la necesidad de hacer modificaciones a su estructura, a diferencia del biodiésel hecho de grasas animales o aceites vegetales que sí necesitan una adaptación para funcionar.
Por ahora este desarrollo, está en una etapa de producción experimental y todavía falta mucho para que se llegue al punto de poder satisfacer la necesidad de millones de usuarios.