Luego de la ola de rumores acerca de la colaboración de varias empresas y desarrolladores de aplicaciones con la Agencia Nacional de Seguridad (NSA), Rovio salió a desmentir las acusaciones que exponían a Angry Birds como canal de fuga de información de usuarios. Además, la empresa decidió analizar la publicidad de terceros para brindar mayor seguridad a sus usuarios.
En la publicación realizada por The New York Times y The Guardian, se mostraba como documentación proporcionada por Edward Snowden filtró datos que involucraban a varias empresas y entre ellas, a Rovio y sus Angry Birds.
Sin embargo, la respuesta de Rovio no se hizo esperar y rápidamente publicó un informe que desliga su trabajo del requerido por las diferentes agencias de seguridad norteamericanas.
El CEO de Rovio, Mikael Hed, ha destacado que “la confianza de nuestros fans es lo más importante para nosotros y nos tomamos la privacidad muy en serio”. Por este motivo “no colaboramos, confabulamos , ni compartimos los datos con las agencias de espionaje en cualquier parte del mundo”.