Bethesda presenta The Elder Scrolls: Castles, un simulador de administración de recursos para celulares. ¡Lo probamos y te contamos en nuestra reseña sí es digno del trono!
The Elder Scrolls: Castles es el hijo no reconocido de The Elder Scrolls y Fallout Shelter. En él ocupamos el rol de un rey que tomará decisiones para que su reino prospere o no. Desde asignar trabajos a los pobladores, negociar con otras comunidades, resolver disputas entre habitantes y más. Todo al mismo tiempo que los súbditos viven momentos de alegría o tristeza, forman sus familias, combaten para cumplir misiones o incluso se traicionan. ¡Cada decisión cuenta y en nuestra review te contamos todo para que seas un rey como corresponde!
Cuando se heredan responsabilidades…
Este juego nos introduce a través de una sucesión, luego de que el rey de turno ha muerto asesinado. Es allí donde debemos optar entre un puñado de candidatos para ver quién toma el lugar en el ansiado trono, con la correspondiente envidia del resto. Para ello, podemos guiarnos entre las características de la personalidad que tiene el personaje en cuestión como para llevar las riendas de tan importante puesto. Aunque obviamente queda a gusto de cada uno y el tipo de reinado que tenga en mente…
Es desde ahí que empezamos a administrar nuestro castillo, ocupado por nobles y plebeyos. La principal tarea del rey es la de tomar decisiones en pedidos de sus súbditos, que pueden impactar de forma positiva o negativa en ellos, tal como la vida misma. Algunos ejemplos son ayudar a un grupo de guerreros en su combate con suministros, invertir en expediciones para eliminar invasiones de trasgos, optar por algún sucesor en lugar de otro (que puede llevar a muertes a traición y destierros) o simplemente recibir regalos, entre otras.
Esto puede afectar al bienestar de integrantes en particular o al de todo un grupo racial, como orcos, elfos oscuros, etc.
Construcción día a día
En este título, un año transcurre en un día real y dentro de este periodo se pueden cumplir varias tareas para desarrollar nuestro castillo. Lo principal es la obtención de recursos para sobrevivir y esto se logra mediante la construcción de diferentes recintos: cocinas para mantener a todos con energías, aserraderos para conseguir madera y caliza para edificar, aceiteras para mantener todo iluminado y funcionando, forjas para hacernos con metales, talleres para conseguir herramientas de trabajo o armerías, entre otros. Incluso se pueden hacer dormitorios para que los pobladores tengan intimidad y puedan gestar sus retoños, siempre y cuando haya química…
Este juego nos introduce a través de una sucesión, luego de que el rey de turno ha muerto asesinado. Es allí donde debemos optar entre un puñado de candidatos para ver quién toma el lugar en el ansiado trono, con la correspondiente envidia del resto.
Estos cuartos tienen requisitos de espacio a modo de casilleros cuadrados y consumen suministros para poder concretarlos (para una segunda unidad ya hay más exigencia).
Cada personaje tiene sus aspectos de personalidad que los hacen más o menos aptos a tareas puntuales, algo que se puede potenciar si los equipamos con las herramientas y ropa adecuadas para dicha labor. De esta manera, los recursos se pueden obtener en un tiempo aún menor (algo que también podemos facilitar con pociones especiales).
Las relaciones con otros ciudadanos, el hambre y el desempeño en las actividades impactan en su ánimo, pero podemos mejorarlo con buenas decisiones como gobernante o al hacer que se diviertan a través del uso de un área de instrumentos musicales. No es un dato menor que el reloj es tirano y podemos perder protagonistas por muerte natural, algo que podemos contrarrestar con el desarrollo de los más pequeños.
¡Fus Ro Da-le con todo!
Otro elemento importante del juego es el combate, que se lleva a cabo a modo de misiones donde enviamos un grupo de pobladores al frente de batalla en un mapa que se separa por niveles cuya dificultad crece según avancemos. Los enemigos serán más fuertes, con el agregado de jefes más potentes.
Acá también influyen la calidad de las armaduras y armas, que se pueden mejorar en la armería, además de los rasgos de cada miembro que los hacen más aptos para los duelos (hasta tienen habilidades características). La acción ocurre de modo automático, a excepción del empleo de las técnicas.
Mantener a los elegidos con vida es crucial, ya que sino perdemos una unidad para las siguientes instancias. Para ello tenemos pociones o podemos volver al bar del reino para que se restablezcan luego de un tiempo específico.
A medida que pasemos etapas, las recompensas serán mejores, sobre todo para equiparnos bien. Asimismo, hay eventos que habilitan otros caminos y tienen premios únicos.
Recados a la orden
En cuanto a contenido adicional, nos encontramos las típicas misiones que nos recompensan con paquetes de diferentes objetos, gemas o hasta personajes raros. Estas se separan en Tareas (objetivos específicos), Reales (son más a largo plazo o temáticas de evento), diarias y semanales.
Cada personaje tiene sus aspectos de personalidad que los hacen más o menos aptos a tareas puntuales, algo que se puede potenciar si los equipamos con las herramientas y ropa adecuadas para dicha labor. De esta manera, los recursos se pueden obtener en un tiempo aún menor
Los diferentes logros alcanzados aportan a una barra de experiencia donde sube el nivel de nuestro perfil, lo que permite desbloquear jugosos premios y nuevas construcciones.
Adicionalmente, se puede comerciar diversos recursos o fabricaciones como vestimentas o herramientas por cantidades de oro que varían según lo solicitado (esta moneda se usa para mejorar los cuartos del castillo).
Obviamente, no falta la tienda en la que podemos intercambiar las gemas que conseguimos o compramos por personajes, objetos para acelerar tiempos de espera (uno de los principales puntos en contra) y demás.
¿Cómo se siente en los celulares?
The Elder Scrolls: Castles no es un juego que demande mucho visualmente, pero aun así tiene muy buenas animaciones, por lo que en un dispositivo gama media puede funcionar correctamente. Los controles son tan simples como tocar en la pantalla las opciones que queramos o deslizar el dedo para ubicar personajes en el castillo o las construcciones donde deseemos, además de algunas skills en pelea.
En cuanto a batería si puede convenir buscar un smartphone con buena duración y siempre tener el cargador a mano, sobre todo los tiempos de espera que tiene para algunas acciones. Si bien se puede hacer zoom para ver con más detalle el castillo, es ideal tener una pantalla amplia para ver mejor todo.
Este simulador de recursos se puede descargar de forma gratuita en Playstore y App Store con un peso de 531 MB.
The Elder Scrolls: Castles es una interesante propuesta que sale un poco de los que no tiene acostumbrado la saga y trae lo que hizo popular a Fallout Shelter. Nuestras decisiones ganan mucho peso a la hora de avanzar y mantener un reinado, con todas las dificultades y envidias que puede haber en medio.
Las variables en cuanto a cómo se puede mantener el castillo y a lo que podemos hacer lo hacen atractivo, pero a su vez lo hacen un arma de doble filo a la hora de forzarnos a usar la tarjeta de crédito si queremos progresar más rápido. ¿Vos te animás a sentarte en el trono que te ofrece Bethesda?
FECHA DE LANZAMIENTO 9 de septiembre de 2024 GAMA Media / Alta DISTRIBUIDOR Bethesda PESO 531 MB