Resident Evil 4 Remake trae el clásico shooter de acción con elementos de terror a la nueva generación de consolas en una versión increíble. Te contamos por qué esta versión sí merece que una vez más pagues por este juego que ya jugaste tantas veces, ¡acá!
¿Resident Evil 4 Remake? ¿Otra vez? Sí, una vez más, uno de los juegos más relanzados en la historia del gaming tiene una nueva versión pero esta ocasión es distinta. Resulta que no estamos frente a un port con un par de gráficos mejorados, algo en VR o un sistema tipo Wii o PS Move para apuntar con algún periférico raro. El eterno clásico de Capcom está de regreso en una remake completa que convierte a la obra maestra en una experiencia aún más completa donde no solo cambia el motor gráfico, la jugabilidad y demás sino que también hasta se expanden los mapas para darle sabor a mundillo semiabierto más en línea con el presente de la saga que ahora jugamos en PS5. Sí, es lo mismo pero es mejor y si te encanta tenés que jugarlo de nuevo.
Una cuestión de legado
No es una exageración decir que Resident Evil 4 es uno de los videojuegos más importantes de todos los tiempos. Originalmente lanzado para Game Cube en 2005, el juego fue eventualmente porteado a cada consola que existió durante o después de ese ciclo. Existen versiones para PS2, PS3, PS4, Xbox, Xbox 360, Xbox One, Wii, Switch, Android, iOS y PC. Esto no es casualidad: RE4 no solo reinventó la saga con un mundo tridimensional con cámara sobre el hombro en vez de cámara fija como los juegos anteriores sino que su modelo de disparos en tercera persona es la plantilla sobre la que se construyeron desde el reboot de Tomb Raider y Uncharted a Gears of War y Vanquish. Su legado es único, irrepetible, y su influencia no puede ser medida solo por sus logros artísticos sino también por cómo cambió la industria.
Resident Evil 4 convirtió a la saga de survival horror a un juego más centrado en la acción, los disparos y las escenas imponentes. Ahora sin zombies, la saga podía explorar otros tipos de virus con jugabilidad más dinámica y tramas más estilo películas de acción. Esto hizo que cada vez vendiera más pero en el proceso alienara a algunos de sus fans clásicos. Por suerte, la tendencia comenzó a revertirse con la salida de Resident Evil 7, otro título brillante, que hizo de preludio a RE2 Remake, RE3 Remake y RE8 Village, dando paso a una nueva edad de oro que fusionaba los dos. Entonces, ¿por qué es necesario una remake de RE4? Porque ahora Capcom está en su mejor momento, y esta obra maestra se merece recibir el fruto de las lecciones que aprendieron en los últimos años.
Remake expandido y aumentado
Resident Evil 4, en esta nueva versión, es más que un port. El juego está completamente recreado desde cero, el motor gráfico es nuevo y da visuales de última generación, de lo mejor que el RE Engine haya dado hasta ahora. Esto hace que la jugabilidad haya cambiado y tenga varias adiciones. Para empezar, si bien sigue siendo un juego de acción y disparos en tercera persona, ahora podés moverte y caminar mientras apuntás (¿podés creer que en el original no podías?), pero también tenés botón para agacharte que bien usado sirve para esquivar ataques enemigos, y hasta tenés ‘parries’ con tu cuchillo que desvian golpes. La acción es muchísimo más frenética y dinámica, y cuando los enemigos te rodean en vez de caminar lentamente hacia vos se arrojan con furia para que los mantengas a raya a escopetazos y no pares de moverte mientras disparas.
Por otro lado el cuchillo es ahora un recurso que se desafila y vas a estar forzado a explorar y buscar en lugares para agarrar nuevos o reparar el tuyo. En ese sentido, Resident Evil 4 Remake te da más excusas que nunca para que explores lo que dejó de ser un shooter de pasillo y áreas más grandes para convertirse en un mundo semiabierto al estilo RE8, donde vas y venís constantemente. Sí, sigue siendo un juego lineal pero como RE8 tenés mucha más libertad de acción en áreas que vas a recorrer varias veces. Es que, para recompensar al jugador que busca hasta la última caja, ahora áreas como el lago ocultan puzzles y vas a recorrerlas de punta a punta en tu botecito para descubrir todos los misterios. ¿Dónde están los hexágonos del puzzle? ¿Qué es ese barco encallado en el medio del agua? Todos estos detalles llaman a tu curiosidad sin ponerte un marcador y está en vos si escuchás el llamado o no.
Lo que sí vas a notar es que los momentos que recordás están todos ahí. Por ahí cambia de orden el lugar de alguna cosa, pero detalles como salvar un perro que después más tarde te ayuda aparecen. Las batallas contra bosses ocurren en el mismo orden del original. Y, Leon sigue siendo Leon: recontra carismático, gracioso, y no se calla nunca.
Por el lado de Ashley, fiel a lo que ya viste en remakes anteriores, vas a notar que la hicieron un poco más adulta y tiene la voz más grave para que no te taladre los oídos al grito de “¡Leeoooooon!” cada vez que la secuestran. A la vez, está vestida mucho más modestamente y no hay secuencias de que se le ve la bombachita en la escalera o sexualización gratuita que reste, por campy que sea.
Lo que sí es un cambio no del todo feliz es el mercader. El rol del personaje es comprar tu equipamiento sobrante o joyas que encuentres que cambiará por plata para que mejores tus armas. Pero, el personaje que era recontra icónico en el juego original ahora habla todo el tiempo casi como si fuera Deadpool y con una voz nueva que no tiene el carisma de antes. No es que desentone, pero no vas a poder evitar extrañarlo si ya tenés experiencia con el juego de 2005. Ese quizás sea el único punto negro de esta Remake y hubo que esforzarse para encontrarlo.
Tu memoria no te falla, esto no estaba
Sin caer en el territorio de los terribles spoilers, podemos confirmar que RE4 Remake está lleno de novedades. A los múltiples puzzles y diseño de nivel interconectado que hablábamos más arriba, ahora se suma un sistema de quests. Muchas veces vas a encontrar papeles azules colgados de alguna pared que te van a hacer algún pedido en específico estilo “rompé X cosa”, “traele tal cosa al mercader” y demás que te recompensan con espinelas. En esta versión del juego, las espinelas son una moneda especial que sirve para intercambiar por items como mapas, armas o accesorios. Sí, antes habían quests de este tipo, pero ahora son un motivo más para recorrer el mapa buscándolas y tenés más libertad al poder elegir las recompensas, si querés ahorrar o patinarte la plata en cualquier cosa.
Del mismo modo, te vas a encontrar con áreas que no estaban presentes antes, y lo mejor – enemigos nuevos que van a requerir que hagas uso de nuevas técnicas para soportar su embestida. Como este es un juego de acción, nunca te va a faltar la munición si te mantenes rotando de arma porque los enemigos dejan caer items. Pero, si confias en una sola, rápidamente te vas a ver acorralado y sin defensa. En ese sentido, hay armas nuevas como la ballesta que permite matar en silencio o tenés la posibilidad de usar el sigilo para apuñalar. Esto dota al juego de nuevos y diferentes momentos de tensión donde hasta podés elegir tus propias tácticas para hacer un combate más inteligente, y es una joya.
El tono se mantiene, y es una maravilla
Resident Evil 4 Remake rescata del juego original su tono de película de acción cruza con bizarro, y lo hace con un estilo increíble. Muchas veces, cuando se hace un proyecto tan caro, los remakes tienden a olvidar la fuerza del original y mucho del humor se pierde en el proceso. Este no es el caso acá y tenés montones de líneas que aportan comedia y liviandad al frenético combate, y no vas a saber si a Leon querés invitarlo a un asado o pegarle por hacer chistes horribles. Comparado a lo solemne que pueden ser Ethan o Chris en RE8, esto se siente como una película de Schwarzenegger donde más de una vez te van a sacar una sonrisa por la yuxtaposición de adrenalina con un comentario gracioso.
Sin embargo, no es que al juego le falte oscuridad o momentos épicos y tensos. Particularmente destacables son las batallas contra los bosses que impresionan por su tamaño y creativas mecánicas a la hora de enfrentartelos. Son imponentes, exudan personalidad y dan paso a momentos increíblemente memorables que van a requerir que lo pongas todo para obtener la ansiada victoria. Así, el tono tenso y lo bizarro se complementan para crear una experiencia que es una espectacular fantasía de poder pero que no se toma tan en serio a sí misma como para ser pesada.
En conclusión
Resident Evil 4 Remake nunca fue necesario, en los papeles. El juego original está disponible en todas las plataformas actuales, su legado es incuestionable, y todavía se juega como los dioses. Sin embargo, a fuerza de carisma, una inyección de nuevas ideas y sí, ganas de hacer plata, acá tenemos una versión que no solo merece existir sino que se hace un lugar propio. Fiel a lo que vimos en remakes previos de la saga, estamos frente a una reversión de una obra maestra que en vez de reemplazar complementa y expande, y lo hace con el mejor de los gustos. El diseño de nivel es una joya, los sistemas de combate increíbles y actuales, y la acción frenética como la recordas.
Si tu duda es si los cambios justifican volver a pagar para jugar este juego que ya pasaste tantas veces (en serio, tiene casi 20 años el original…) la respuesta es sí. Si lo experimentas por primera vez, esta es la mejor versión, y si lo estás experimentando de nuevo los agregados son tantos que vale la pena recorrerlo de nuevo: es igual en lo que importa, pero en lo que no, es mejor.
FECHA DE LANZAMIENTO 24 de marzo de 2023 DESARROLLADOR Capcom DISTRIBUIDOR Capcom PLATAFORMAS PC, PS4, PS5, Xbox Series X|S