Final Fantasy XVI para PC te transporta a un mundo inmersivo, lleno de drama y acción en partes iguales…pero a cambio pide bastante de tu computadora ¡Te contamos todo en esta review!
Hace un poquito menos de un año te comentábamos que Final Fantasy XVI era un producto CASI perfecto. Hoy, tuvimos la oportunidad de revisitar y reconfirmar eso que escribimos, pero esta vez dejando la play de lado y subiéndonos a la experiencia PC. Jugamos el último título de la saga de JRPG’s más importante de los videojuegos y queremos compartir con vos lo bueno y lo no tanto…
Primero… el elefante sobrecalentado en la sala
Cuando hablamos de un port, lo primero que tenemos que charlar es de la optimización. Y lamentablemente, la primera impresión que tenemos de Final Fantasy XVI es que a la optimización de este juego le faltó una vuelta de tuerca. Lo primero que hay que hacer antes de jugarlo, es asegurar que todos nuestros controladores estén actualizados (deberías tenerlos siempre actualizados, pero en muchos juegos esto no es un problema). Lo siguiente, va a ser rezar un poquito y tocar algunos ajustes.
Antes que nada, repasemos los requerimientos:
Mínimo:
- Requiere un procesador y un sistema operativo de 64 bits
- SO: Windows® 10 / 11 64-bit
- Procesador: AMD Ryzen™ 5 1600 / Intel® Core™ i5-8400
- Memoria: 16 GB de RAM
- Gráficos: AMD Radeon™ RX 5700 / Intel® Arc™ A580 / NVIDIA® GeForce® GTX 1070
- DirectX: Versión 12
- Almacenamiento: 170 GB de espacio disponible
- Notas adicionales: 30FPS at 720p expected. SSD required. VRAM 8GB or above.
Recomendado:
- Requiere un procesador y un sistema operativo de 64 bits
- SO: Windows® 10 / 11 64-bit
- Procesador: AMD Ryzen™ 7 5700X / Intel® Core™ i7-10700
- Memoria: 16 GB de RAM
- Gráficos: AMD Radeon™ RX 6700 XT / NVIDIA® GeForce® RTX 2080
- DirectX: Versión 12
- Almacenamiento: 170 GB de espacio disponible
- Notas adicionales: 60FPS at 1080p expected. SSD required. VRAM 8GB or above.
En nuestro caso, jugamos con una PC con procesador AMD Ryzen 3600, 16 GB de RAM y una tarjeta NVIDIA GeForce 3080. Si bien el procesador estaba un poco atrás de lo solicitado para recomendado, al cargar la primer cinemática el juego se nos tildaba y era necesario reiniciar. Lo solucionamos instalando nuevamente los controladores y bajando los gráficos de calidad ultra a alta. Se ve bien, pero sinceramente, esperabamos un poquitito más de la optimización. Una vez corriendo, el juego experimentó algunas caídas de frames, pero nada constante o muy molesto. La fluidéz gráfica es esencial para una experiencia correcta. Todo el tiempo estarán pasando cosas, habrá mucho combate rápido y muchísima cinemática. Lo siguiente que notamos es que la temperatura empezó a subir demasiado. Acá hacemos un poco de mea culpa de que quizás a nuestro gabinete le falte algún ventilador…pero no obstante, hay que tenerlo en cuenta.
En nuestro caso, jugamos con una PC con procesador AMD Ryzen 3600, 16 GB de RAM y una tarjeta NVIDIA GeForce 3080. Si bien el procesador estaba un poco atrás de lo solicitado para recomendado, al cargar la primer cinemática el juego se nos tildaba y era necesario reiniciar.
Lo siguiente que hacemos cuando encontramos dificultades técnicas es mirar al juego a los ojos y preguntar ¿Soy yo o sos vos? y medio parecido a lo que le pasó a tu ex, el problema efectivamente eras vos. El juego para reseñar llegó casi a fecha de lanzamiento y por eso pudimos ver que otros reviewers tuvieron problemas similares, jugando incluso con mejor hardware. Es muy probable que hasta que haya un nuevo parche, la experiencia solamente sea disfrutable 100% en las PC Gamer de gama muy alta.
Ahora sí, vamos a hablar de Final Fantasy XVI
Cinematografía que se juega
Final Fantasy XVI es quizás uno de los mejores títulos de la saga, casi a la altura de los grandes clásicos como el 8 o el 7. Vengan de a uno, estamos dispuestos a irnos a las piñas por esta afirmación y los atendemos a todos.
Una gran historia, una jugabilidad entretenida y atrapante, personajes humanos con muchas dimensiones, magia, romance, drama, pelea, acción, mundo semi abierto, misiones secundarias, Eikons, chocobos, Moogles, Y UN PERRO AL QUE PODÉS ACARICIAR. FFXVI lo tiene CASI todo. Sí, casí. Venimos repitiendo constantemente esa palabra. A nuestro criterio la historia es buena pero quienes están más ‘habitués’ de tramas de fantasía pueden adivinar bastante fácil los giros y las vueltas que da el juego. Eso no quiere decir que sea un juego malo. Si la perfección (FFVIIR) es un 100/100, Final Fantasy XVI es -una vez solucionados los problemas de rendimiento, por supuesto- 97 o 98.
Final Fantasy XVI es quizás uno de los mejores títulos de la saga, casi a la altura de los grandes clásicos como el 8 o el 7.
En un mundo donde existen cristales para darle poderes mágicos a las personas y no ser hegemónico parece estar condenado por la ley so pena de crucificción, los humanos hicieron con la magia lo que mejor saben hacer: la guerra. Esta vez nos ponemos en la piel de Clive Rosfield, Escudo del ducado de Rosaria, nación bendecida con el poder del Fenix, una de las invocaciones típicas de la saga.
Las invocaciones -aquí llamadas Eikons- son bestias qeu elijen a un Dominante. El dominante tiene el poder de convertirse en la invocación y controlarla a su gusto. Y es por eso que los Dominantes suelen tener títulos nobiliarios y como tales, son protegidos por personas con mucha habilidad. Así es como se nos presenta Clive, quien desde muy joven recibe la tarea de proteger a su hermano menor, Joshua, Dominante del Fenix.
El destino de Clive cambia cuando una noche el ducado -y por consiguiente Joshua- es atacado por otro Eikon de fuego, Ifrit y…y…y no te vamos a decir más nada porque queremos que lo juegues vos.
La realidad es que todo el juego es más bien una película con interludios que nos tomamos para completar una misión, pelear, obtener materiales para mejorar nuestro equipo y demás. Es un juego TAN cinematográfico que incluso dentro de las peleas hay Quick Time Events que se convierten en esquives o golpes que nos van a permitir sumar drama al drama y acción a la acción. Esto vuelve al título un juego difícil de soltar, porque la historia nos impide el “sentarnos un ratito y me voy a dormir”. Para que lo tengas en cuenta si jugás de noche y laburás al otro día.
Combate y sistemas de Final Fantasy XVI
El combate es algo que lleva mutando en los últimos juegos de Final Fantasy. Lejos ya del sistema por turnos al que veníamos tan acostumbrados los que hoy tenemos dolor de rodillas, FFXVI, intercambia esto por acción al mejor estilo Devil May Cry. Si bien las estadísticas están e importan, esto es menos estrategia y más TOCÁ RÁPIDO, HACÉ COMBO, DALE CON LA SILLA.
Una de las mayores diferencias es que en esta opotunidad solo podremos controlar a Clive. El resto de nuestros compañeros entrarán y saldrán del equipo y nos apoyarán pero al único que manejaremos es al protagonista. También podremos darle órdenes a nuestro perro, Torgal, que nos acompañará casi siempre y podemos pedirle que cure o ataque.
Una de las mayores diferencias es que en esta opotunidad solo podremos controlar a Clive. El resto de nuestros compañeros entrarán y saldrán del equipo y nos apoyarán pero al único que manejaremos es al protagonista. También podremos darle órdenes a nuestro perro, Torgal, que nos acompañará casi siempre y podemos pedirle que cure o ataque.
Clive tiene acceso en un inicio a los poderes del Fenix, que controla magia de fuego. Con el correr de la historia vas a adquirir nuevos poderes. Cada árbol tiene mejoras y eso significa que vas a poder hacer nuevos combos. Si el combate en tiempo real no es lo tuyo, desde el arranque tenemos algunos elementos que lo hacen mucho más llevadero, como anillos que te configuran automáticamente los combos.
El juego es además bastante accesible. En un principio solo tendrás dos dificultades, y una vez que termines la historia -que está cerca de las 38 horas de contenido- podrás acceder a una tercera, más desafiante. Si bien se extraña el poder ser estratégico, es una experiencia refrescante y con buen nivel de entrada para todos los jugadores.
Además de pelear con Clive, en ocasiones vas a tener que controlar un Eikon para pelear contra otro y cuando esto ocurre, la sensación de combate épico es increíble.
Las side quests son disfrutables también y si bien no son necesarias para la historia, te ayudarán a comprender mejor el mundo de Valistea, un reino medieval sumido en guerra, destrucción y una plaga que está acabando de a poco con todo…o sea un reino medieval cualquiera…
Final Fantasy XVI Sale con fritas…y dos DLC
Como es costumbre en los ports, este juego ya tiene incluidos sus dos DLC: Rising Tides y Echoes of the Fallen. Ambos tienen una quest extra que ocurre posterior a la historia principal. Además de ampliar un poco el universo y el lore del título, los DLC de Final Fantasy XVI están pensados para ser más desafiantes en cuanto jugabilidad.
En Echoes of the Fallen, el primer DLC que salió, tendrás la oportunidad -luego de cumplir una serie de pre-requisitos- de explorar un poco más Valistea hasta llegar a una torre. La torre es un calabozo de alta tecnología…pero más complicado. Mucho más complicado. En una sentada y sin poder salir, vas a tener que enfrentarte a enemigo peligrosos, manejando tus recursos de la mejor forma posible. Al mejor estilo de los primeros Persona. Lo que te espera arriba es un super boss. Así que muchísima suerte si Clive no está en nivel 90 para cuando termines. En este DLC no solo será clave el combo que armes con las habilidades y los objetos, también será menester que sepas posicionarte. En general y no siendo manco, extiende unas 3 horas el contenido del juego.
Rising Tides, por otro lado, trae consigo una nueva región para explorar Valistea y averiguar qué ocurrió con Leviathan, un eikon que -sin hacerte spoilers demasiado importantes- en la campaña original nos presentan como que está perdido. Es un DLC bastante más completo y cargado de contenido que el anterior. Además de más de una decena de quests y la épica pelea contra el eikon perdido, cuando termines todo lo que hay para hacer…vas a tener acceso a un área que nos presenta el mayor desafío de dificultad del juego. Así que ahí está tryharderos, a no llorar que era demasiado fácil.
Dicho esto….muchísima suerte. ¿Vieron que algunos dicen que debería haber una dificultad por debajo de fácil para periodistas de videojuegos? Lo dicen especificamente por nosotros. Somos malisimos. Seguimos llorando.
Conclusión – Cuando venga el parche, jugalo que no lo vas a lamentar
Qué lindo es volver a hablar bien de un Final Fantasy, después de que el XV paso sin pena ni gloria. Lo más importante es que hay una demo para que puedas probar el juego antes de decidir comprarlo. Cuando se parcheen los problemas de optimización y tengas la demo…podés usar eso para tomar la decisión.
A título personal y después de jugar, podemos decirte que es un juego que no te podés perder si sos fan de los FF. Si tal es el caso, no sabemos ni por qué te estás preguntando todavía si vale la pena. Volvemos a decir que es, sin dudas, uno de los mejores que han salido desde los clásicos. Preparate para las cinemáticas. Porque son muchas…MUCHAS…PERO MUCHAS. Si las salteas porque no te interesan, ¡¿QUÉ HACES JUGANDO UN FINAL FANTASY?!
La jugabilidad es divertida, la historia es atrapante, está lleno de condimentos y tiene todo lo que quieren las wachas…digo, los fans. La épica se maneja desde el primer al último momento y los DLC añaden ese plus de dificultad que podía faltarle a los fanáticos de los desafíos durante el juego base.
¿Honestamente? No nos juzgues por ser Final Fantasy lovers. Nacimos por nuestra madre, moriremos por Yoshi-p
FECHA DE LANZAMIENTO 17 de Septiembre de 2024 DESARROLLADOR Square Enix DISTRIBUIDOR Square Enix PLATAFORMAS Play Station 5, PC