Final Fantasy IX ya está disponible en Switch y Xbox One con un port que da a los fans de la saga la posibilidad de jugar el clásico en nuevas plataformas. Leé los detalles de esta llegada, ¡a continuación!
Final Fantasy IX, el juego lanzado originalmente para PlayStation 1 en el año 2000, se convirtió en uno de los grandes clásicos de la saga. Tras años y años de espera, finalmente llegó a PC, PS4, y luego a Xbox One y Switch el pasado 13 de febrero de 2019. Esta nueva versión brinda a varios jugadores la posibilidad de experimentar por primera vez la historia de Zidane y su grupo en lo que fue el último Final Fantasy clásico.
Final Fantasy IX cuenta la llegada de un grupo de actores al reino de Alexandria para el cumpleaños de la princesa. Estos actores en realidad son mercenarios que tienen la misión de secuestrarla, hecho que coincide con que la princesa literalmente pida que se la lleven del reino porque su madre está cada vez más loca y quiere comenzar todo tipo de guerras. A lo largo de la aventura, se nos explica los motivos de cada uno de estos aspectos, a medida que se nos unen personajes eternos como Vivi, el mago negro, Steiner el caballero de la guardia o Freya, la caballero Dragoon. Pero, como esto es Final Fantasy, eventualmente aparecen entidades cósmicas y habrá que salvar el mundo.
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La modalidad de juego es JRPG en su estilo más clásico. Tendremos control de un equipo de 4 personajes que rotarán de acuerdo a la historia, y que podremos eventualmente elegir para controlar a nuestros favoritos. A medida que exploremos el mapa principal o los diferentes lugares del mundo, enfrentaremos todo tipo de criaturas, bosses, y más con el clásico menú de pelea donde elegiremos si usar un ataque, un item, o habilidades especiales de nuestros personajes. Por ejemplo, Vivi hace magia elemental, Steiner técnicas con su espada, Eiko invoca poderosas criaturas y cura, y Amarant hace lo que puede.
La versión del juego disponible en Xbox One y Switch no es la del año 2000 en PS1, sino la que hace un tiempo podemos disfrutar en PC vía Steam o PS4. Esto significa que el juego cuenta con menúes renovados y un par de “trucos” que podés activar para obtener dinero infinito o el máximo de experiencia en batalla. Sin embargo, la mejor adición es una que permite “acelerar” el paso del tiempo como un botón fast forward que se activa al poner pausa, tocar R1, y sacar pausa. Ojalá el sistema fuera más parecido a FFXII, y lo pudiéramos hacer sin pausar antes, pero esto ayuda mucho con el tedio de los encuentros aleatorios.
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Los gráficos están un poco retocados para ofrecer modelos que se luzcan en HD, aunque no cambian el estilo de arte. En otros detalles, esta versión de Final Fantasy IX es básicamente la de smartphones. Es una versión digna, con todas las cosas que tiene que tener, pero que muchas veces nos deja con un sabor de “podría estar implementado mejor”, especialmente cuando lo que hicieron con Final Fantasy XII funcionó tan bien. Por suerte, el juego debajo del aspecto técnico es un clásico que muchos fans recuerdan como el mejor de la serie.
Los personajes de Final Fantasy IX resonaron con los fans en su momento, y aún ahora se mantienen vigentes con situaciones que, elementos de fantasía aparte, hablan de sensaciones muy humanas. La más recordada de ellas es la subtrama de Vivi, y de enfrentarse a su mortalidad, que al día de hoy es uno de los puntos altos de la saga. Del mismo modo, el reencuentro de Freya con Fratley es una deliciosa tragedia, y las historias de Eiko y Dagger se combinan de forma agridulce. No todo son triunfos – Amarant y Quina son bastante insípidos, y aunque Steiner no está mal uno no puede dejar de preguntarse por qué no podemos controlar a Beatrix en vez de a él. Fuera de esto, es un juego que en pocas líneas logra caracterización increíble sin siquiera tener que usar voces actuadas.
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Final Fantasy IX tiene mucho énfasis en su historia, que bloquea y desbloquea las áreas del mundo que podemos visitar en cada momento dado para darnos probadas ocasionales de libertad. La trama arranca muy bien y con mucha potencia, pero se desinfla camino al último tercio del juego con algunas decisiones arbitrarias con respecto a Zidane al que de repente quisieron convertir más que “un chico ladrón metido en algo más grande que él“, y no termina de cerrar. Lo que siempre se mantiene arriba es la banda de sonido, candidata para ser la mejor de toda la serie con montones de piezas inolvidables de la mano del legendario maestro Nobuo Uematsu. Incluso cuando el juego está en su punto más bajo a nivel historia y comienza a sonar “You are not Alone“, te desafiamos a no emocionarte.
Final Fantasy IX es un sentido cierre a la primer época de la saga, que combina mucho de la estética medieval y fantástica de la primer época con algo de la ciencia ficción de FFVII y FFVIII. Con sus altos y sus bajos, quizás sea uno de los Final Fantasy más puros para explicar de qué se trataba la saga antes de la era de la PS2, y al día de hoy se mantiene tan entretenido como el primer día. Si nunca jugaste un Final Fantasy previo al 2000, este es un gran punto para empezar y ver de qué se trataba, y si sí lo jugaste y te genera nostalgia, las mejoras de calidad de vida hacen que esta versión sea superior a su edición original.