Review Crash Bandicoot 4: It’s About Time – más difícil que el propio 2020

Crash Bandicoot 4: It’s About Time marca el esperado regreso del marsupial más conocido del gaming al panorama actual en su mejor forma. Te contamos todos los detalles, ¡a continuación!

Crash Bandicoot 4: It’s About Time es el nuevo juego de la saga del que alguna vez fuera la mascota de PlayStation. Este juego de plataformas en 3D nos vuelve a poner a recorrer niveles dificilísimos, complicadísimos, y donde vamos a morir incontables veces. A la vez, esta nueva entrega va directamente a los orígenes de la saga para dar una experiencia que se siente en línea con los primeros tres juegos de la saga, pero que lanza ahora para Xbox One y PlayStation 4, y tras contarte de qué va la demo te hablamos de nuestras impresiones del juego completo.

Existen montones de juegos con una reputación de ser dificilísimos pero pocos le hacen tanta justicia a esto como la saga Crash. Esta saga de plataformas en 3D con cámara fija nos pone a recorrer niveles lineales llenos de enemigos, obstáculos y secuencias de saltos hiper intensos que te hacen revolear el control, o enamorarte de su juego hiper preciso. Crash Bandicoot 4: It’s About Time mantiene esta línea como un verdadero sucesor de la trilogía original y así deberemos navegar escenarios donde todo te mata y en la pantalla pasan cosas increíbles.

Están de regreso las icónicas secuencias donde Crash corre hacia la pantalla mientras algo enorme lo persigue y tenés apenas un par de segundos para reaccionar, pero también hay escenarios más abiertos donde tenés que hacer uso de tu máxima precisión para esquivar incontables peligros. Todo en Crash Bandicoot 4 te mata, todo excepto los objetos coleccionables ocultos en cada nivel y los ansiados checkpoints. Navegar los enormes y variados escenarios es tanto una cuestión de talento y habilidad como de prueba, error y memoria muscular para que cada vez te salga mejor cada secuencia y no tengas que despedirte de tus preciadas vidas.

La gran novedad en Crash Bandicoot 4: It’s About Time son las cuatro máscaras cuánticas, objetos legendarios que permiten dominar el tiempo y el espacio. En la ficción del juego los villanos intentan escapar la prisión a la que fueron sometidos, y la única forma de que Crash y su hermana Coco puedan detenerlos será al usar estas máscaras. Cada una tiene una habilidad única: por ejemplo, una puede hacer que los objetos entren y salgan de fase y puedas atravesarlos, otra invierte la gravedad, otra ralentiza el tiempo, y la última permite devolver ataques. Cada una de ellas se combina con diferentes e inteligentes secuencias de plataformeo que da lugar a escenarios únicos que, por supuesto, te van a hacer morir mil veces.

La clave de Crash 4 es que nunca vas a estar en duda con respecto a qué hacer o cómo proseguir. El juego siempre te hace sentir que sabés qué tiene que ocurrir, pero solo necesitas reaccionar a tiempo y jugar mejor. Por suerte, el juego tiene dos modos: el clásico, donde las vidas son finitas y cada error cuesta caro; y el moderno, que es mucho más gentil y te da vidas infinitas para que intentes todo mil veces si te hace falta. Lo interesante es que a veces estas secuencias no son un alivio sino un pico de dificultad que requieren que seas extremadamente preciso y diestro, y que lejos de hacer que el juego sea más mansito, se vanagloria en tu dolor. En Crash 4 no superás los niveles: los sobrevivís.

Lo increíble de Crash Bandicoot 4: It’s About Time es cómo al repetir los niveles, memorizarlos, aprender y mejorar cada vez te comienzan a salir mejor. Primero reducís las muertes, después encontrás secretos que te perdiste la primera vez, y finalmente llegas al final del nivel habiendo hecho todo bien solo para caerte en el último pozo porque te distrajiste. Es una deliciosa agonía a la que los desarrolladores Toys for Bob no le tuvieron miedo, y no es para todo el mundo. Si esto te intimida, deberías saber que está perfectamente en línea con la trilogía original y es exactamente lo que los fanáticos de la saga esperaban. Eso sí: si te enojás, descansá, tomate unas horas, y volvé a intentarlo, te va a salir mejor después.

El juego presenta niveles donde controlamos a Crash y a Coco, y una vez que los completes los vas a poder jugar en modo N.Verted. En este, los niveles están espejados, tienen efectos y filtros, y se ven bastante diferentes. Hay niveles en blanco y negro, con filtros granulados, o parecen dibujados a mano. Si pensaste que antes era difícil, esperá a jugar los niveles oscuros donde los enemigos solo se ven cuando te acercas y pulsan en el fondo de la pantalla. A esto además se suman montones de misiones paralelas donde podés controlar a otros personajes como Tawny o Dingodile, pero lo más extraño es poder controlar al antagonista, el mismísimo Dr. Neo Cortex.

Cada uno de los personajes tiene sus propias habilidades, jugabilidad, y niveles específicos. Por ejemplo, Tawny tiene un gancho para cruzar plataformas, Dingodile usa explosivos y armas, y Neo Cortex convierte a los enemigos en plataformas sobre las que saltar. Cada uno de los niveles se entrecruza con los niveles normales y es normal por ejemplo ver a Crash en la distancia o hacer algo que explique algún escenario que vimos la primera vez que jugamos la historia principal.

Completar el juego al 100% será una tarea titánica que requiera varios modos, los objetos coleccionables, las gemas ocultas, y que juegues con varios personajes. El contenido es muchísimo y a medida que desbloquees más cosas vas a poder obtener skins para cada personaje por lo que si te gusta el coleccionismo, tenés horas y horas de búsqueda por delante.

En conclusión

Lo más importante que hay que decir respecto a Crash Bandicoot 4: It’s About Time es que por un lado es completamente fiel al legado de la época de oro, pero que a la vez agrega suficientes novedades como para que no se sienta que jugas lo mismo de siempre. Los gráficos y estética te pueden hacer creer que este es un juego simple, para toda la familia, que vas a pasar en una tarde pero en realidad es un adictivo y frenético juego con la dificultad por las nubes. La muerte está en todos lados y no es apto para los que se frustran fácil, pero esta dificultad sin compromisos es exactamente la tarjeta de identidad de la saga.