La PlayStation 4, la consola más vendida de esta generación, no es sólo pasión de humanos sino también de cucarachas que buscan convertirlas en su hogar. Enterate por qué, y lee un par de tips para evitar que los repulsivos bichos te invadan, ¡en esta nota!
Cuando te preguntabas acerca de los bugs en tu consola, ¿te referías a estos? La PlayStation 4, aparentemente, tiene una propiedad que la hace ideal no sólo como máquina de gaming sino también como hogar de cucarachas. De acuerdo a lo que reporta el sitio web Kotaku en su versión australiana, los repulsivos insectos se meten dentro de la consola y pueden ocasionarle serios daños.
Un local de reparación de Manhattan, XCubicle, reportó cuáles eran los problemas más frecuentes que encontraban en las consolas. Algunos eran monedas dentro de lectoras de discos, intentos fallidos de modding, y… cucarachas. Como contaba el dueño del local, llegaron a juntar bolsas completas de cucarachas muertas extraídas de adentro de las consolas de Sony. Esto ocurre en particular si la consola está en una zona oscura y tibia, y aunque cualquier consola de cualquier era puede convertirse en un nido (las Xbox One con bichos también son comunes), el diseño de la PlayStation 4 la hace idónea para alojar a estos asquerosos bichos. “¡Maldito insecto!“
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Ocurre que el espacio de ventilación de la PlayStation 4 es muy ancho, y si bien esto da excelente flujo de aire, también da a las cucarachas todo el espacio que necesitan para infiltrarse. Además, de acuerdo a los técnicos, la PS4 levanta más temperatura porque su fuente de energía es interna. Si tu PlayStation 4 está cerca del piso, es el nido perfecto. La mayoría de los usuarios que llevan sus consolas a reparar, ni siquiera saben que están infestadas y llenas de cucarachas muertas, y son los técnicos quienes se desayunan con los desagradables bichos cuando abren la consola.
La cuestión es que las PS4 simplemente dejan de funcionar, y los usuarios no saben por qué. Bueno, es porque la fuente electrocuta cucarachas hasta eventualmente hacer cortocircuito y dejar de funcionar. Es todavía peor si los papás y mamás cucarachas hicieron su hogar con bebés cucarachitos a los que brutalmente se los electrocuta, indistintamente de su bondad, sueños para el futuro o voluntad de progresar. Lección número uno, el mundo es injusto.
Los técnicos dicen que, una vez que sos consciente de esto, es fácil reconocer una consola infestada. Las cucarachas dejan bastantes rastros, y sus deshechos (sí) tienen un olor y color particular. A los más experimentados les alcanza con mirar la apertura del ventilador, y si ahí hay rastros, la situación está clara. Para que la consola vuelva a funcionar, se reemplaza la limpia y se reemplaza la fuente quemada.
Lo bueno es que hay acciones preventivas que podés tomar antes de convertir a tu consola en una especie de silla eléctrica para cucarachas. Un dato es que tu consola tiene que tener amplio espacio para respirar, y estar en la altura para que las cucarachas tengan que trepar hasta ellas. Esto dificulta mucho el acceso de los bichos y debería estar cerca de las primeras medidas que pongas en práctica. Sin embargo, lo más importante es lo más obvio: no seas cochino, ¡limpiá tu casa!
