Un chico quiso darle una sorpresa a su hermana en el aeropuerto de Ezeiza al recibirla vestido de Pikachu pero a la ley no le causó gracia. Marche preso por rigor, ¡en esta nota!
La saga pokémon nos entrenó para pensar que no hay nada más sagrado que la amistad y vínculo entre humanos y criaturitas, pero los representantes de la ley no piensan lo mismo. Es que, ayer por la noche en la terminal A del aeropuerto de Ezeiza en Buenos Aires, en la zona de arribos internacionales, apareció un joven disfrazado de Pikachu cual si fuera una comic-con. El motivo es que el chico quería recibir a su hermana que volvía de un viaje y aparentemente era una mega fan.
El gesto, precioso y la intención buenísima. Sin embargo, la cosa se puso rara: Pikachu fue confrontado por la fuerza de seguridad del aeropuerto, que se acercó a él y le comenzó a hacer preguntas. Estuvieron charlando un rato, y eventualmente las autoridades lo escoltaron afuera del predio. Lo entendemos: seguramente temían que sus poderes eléctricos interfieran con los instrumentos de navegación de algún avión… o que se desatara un combate con algún otro Pokémon que aparezca por ahí.
De momento no está claro quién era el portador del traje y tras una búsqueda exhaustiva en Twitter y la red (2 minutos de Google) no pudimos encontrar respuesta. Sin embargo, vamos a decir que su nombre real era Ash Ketchum. Sí, probablemente haya sido eso, y es todo cierto todo confirmado, con mucho de verdad y nada de mentira.
Nintendo no opinó nada, posiblemente porque no se enteraron. Si no, habría juicio por violación de copyright.