Narcos es una de las series más aclamadas de Netflix. Cuenta la vida del narcotraficante Pablo Escobar, donde se destacan situaciones específicas de su vida, momentos y lugares. Pero su hijo Juan Pablo dice que está llena de errores e inexactitudes. Todos los detalles en esta nota.
Sebastián Marroquín es el nombre que ahora tiene el hijo de Pablo Escobar, conocido como Juan Pablo Escobar antes de la muerte de su padre. En su perfil de Facebook el ahora escritor publicó Narcos 2 y sus 28 quimeras, donde enumera punto por punto los errores de fechas, personajes y de conceptos que tiene la segunda temporada de Narcos. A continuación hacemos un pequeño resumen de los 28 puntos:
1. Carlos Henao Q.E.P.D. era mi tío materno y no era ningún narcotraficante como lo pintan en la serie. De hecho era un gran hombre, trabajador, honesto, noble y buen padre de familia. Muy amigo de mi madre. No fue narcotraficante y los de Netflix lo difaman a él y con ello a todos nosotros que somos su familia entera, con total impunidad y tranquilidad. Carlos Henao no fue jamás narcotraficante ni vivió en Miami.
Relacionado: Confirmado: Narcos tendrá tercera y cuarta temporada
2. Mi padre no era hincha del Atlético Nacional, sino del Deportivo Independiente Medellín. Si los guionistas no saben ni el equipo favorito de Pablo, ¿cómo atreverse a contar el resto de una historia así y venderla como cierta?
3. La Quica (Dandenis Muñoz Mosquera) fue apresado en Nueva York el 24 de septiembre de 1991, así que para la fuga de mi padre de La Catedral (julio de 1992) ya llevaba detenido en EEUU un rato largo por falsedad de documentos. Allí fue posterior e injustamente acusado y condenado por la bomba al vuelo del avión de Avianca en el que murieron más de 100 pasajeros y la tripulación y donde se creía que viajaría el sucesor de Luis Carlos Galán, César Gaviria.
4. Sobre el escape de La Catedral: no hubo un enfrentamiento tan grande allí, sólo un guardián de la cárcel muerto (…). La fuga estaba diseñada desde la construcción misma de la cárcel: mi padre ordenó dejar unos ladrillos flojos. Papá se escapó cuando el Gobierno le notificó que le incumplirían el acuerdo de no trasladarlo nunca de esa prisión.
5. Limón (Álvaro de Jesús Agudelo) era trabajador de Roberto alias Osito hermano mayor de mi padre. Trabajó para él como chofer unos 20 años. No se trataba de un aparecido ni fue reclutado al final de la historia de la familia, sino muchos años atrás.
9. Mi padre no mató personalmente a ningún Coronel Carrillo como lo llaman en la serie al Jefe del Bloque de Búsqueda. Atentados le hizo muchos a la Policía de Colombia y en ellos murieron más de 500 en un mes en la ciudad de Medellín al final de los 80.
13. La historia del tal León de Miami es mentira. No vivió en EEUU. Y era un hombre absolutamente fiel y valiente al servicio de mi padre. Murió después de ser secuestrado y torturado por los Castaño en Medellín. Cayó peleando la guerra en nombre de mi padre, pero nunca lo vendió como lo muestran.
16. Jamás mi papá atacó a la hija de Gilberto Rodríguez en su boda ni en su vida. Ni a ningún miembro de su familia. Ése era el pacto, no tocar a las familias. Mi padre lo cumplió.
21. El viaje hacia Alemania no fue así. Mi abuela paterna no viajó con nosotros a ninguna parte.
Relacionado: El hermano de Pablo Escobar le pone condiciones a Netflix por Narcos
23. ¿Virginia Vallejo estaba tan enamorada que le rechazaba la plata a mi padre? Eso si que son dos mentiras en una, ¡y bien grandes! Mi madre nunca habló con ella luego de la fuga de La Catedral. Hacía casi una década que mi padre no tenía contacto con Virginia, quien era amante al mismo tiempo de los jefes del Cártel de Cali.
27. Después de muerto mi padre, mi mamá fue citada a una reunión con el Cártel de Cali en dicha ciudad, allí habían más de 40 grandes jefes mafiosos de la Colombia del momento. Quien le salvó la vida a mi madre y al suscrito después fue Miguel Rodríguez (Orejuela), no Gilberto. En esa ocasión nos despojaron de los bienes heredados y se los quedaron y repartieron como parte del botín de guerra.
Si quieres leer el post de Juan Pablo Escobar completo podes hacerlo en este enlace.
Más allá de todas estas especulaciones sobre errores e imprecisiones, sabemos que la segunda temporada de Narcos en Netflix es brillante. No te la pierdas, en todo caso podes verla por vos mismo y sacar tus propias conclusiones.