Microsoft se encontró con una traba legal en la adquisición de Activision Blizzard cuando el Reino Unido bloqueó formalmente la compra. Conocé los motivos y como sigue la historia, ¡en esta nota!
La adquisición de Activision Blizzard por $69 mil millones de dólares por parte de Microsoft acaba de ser vetada por la CMA, el organismo antimonopólico del Reino Unido. Los expertos se refirieron a la decisión como un golpe potencialmente fatal al acuerdo que le hubiese dado a los de Redmond control sobre Call of Duty, King, Diablo y World of Warcraft. El organismo dijo que sus preocupaciones no podrían ser resueltas ni siquiera por las promesas de la empresa de mantener a los títulos afectados en otras plataformas.
Microsoft dijo que apelará la decisión y presentará quejas formales. El gigante del hardware discute desde hace meses con la CMA para poder potencialmente aprobar la compra y tras muchos idas y vueltas parecía que todo marchaba en orden para que se diera. Sin embargo, el Reino Unido ahora se opone formalmente a la adquisición mientras que todavía se espera la conclusión del organismo pertinente en Estados Unidos, la Comisión Federal de Intercambio (TFC) que se expresará a mediados de año.
Por efecto de la decisión, las acciones de Activision Blizzard se desplomaron 10%. En cambio, las de Microsoft subieron 7.4% producto de un reporte financiero que salió ayer e indicaba que la empresa tuvo un excelente primer trimestre en 2023, a pesar de ver caídas de 30% en la venta de consolas Xbox y el estancamiento en la suma de suscriptores de Game Pass.
La disolución del acuerdo podría costarle $3 mil millones de dólares a Microsoft en gastos.
“Microsoft ya goza de una poderosa posición y ventajas en cloud gaming y este acuerdo fortalecería esta ventaja dándole la habilidad de sobrepasar competidores nuevos e innovadores,” escribió el panel de expertos de la CMA con Martin Coleman a la cabeza. Según el organismo, el acuerdo resultará en precios más altos, menos innovación y menos competencia para los jugadores.
“Estamos comprometidos con esta adquisición y vamos a apelar,” dijo el vicepresidente de Microsoft Brad Smith. “La decisión de la CMA rechaza un camino pragmático para atender los cuetstionamientos de competición y desalienta la innovación e inversión en el Reino Unido.”
Microsoft podrá apelar para ver si tiene otra chance a la compra en 2024.