Dos investigadores desarrollaron una Inteligencia Artificial capaz de engañar a los humanos, aprender de sus tácticas y estrategias, mentir, y ganar en un importante torneo de Poker. Te contamos cómo lo logró, en esta nota.
Algo que mucha gente desconoce es que con los sistemas de Inteligencia Artificial lo difícil no es hacer una inteligencia que tome siempre la decisión correcta con toda la información disponible, sino todo lo contrario, que según el contexto sea capaz de elegir el camino incorrecto cuando sea necesario, como por ejemplo para mentir en una partida de Poker o Truco. Diferente es la lógica que debe seguir una inteligencia artificial en juegos como el Ajedrez, en donde debe analizar los diferentes caminos que puede utilizar, pero que no necesita engañar a su adversario como parte fundamental del juego.
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En este caso hablamos de Libratus, una inteligencia artificial basada en tres subsistemas que corren en una supercomputadora en Pittsburgh, desarrollada por dos investigadores de la universidad de Carnegie Mellon, y que fue capaz de vencer a jugadores profesionales de Poker en una versión bastante compleja del juego llamada Texas Hold ‘Em. Ganando todas las apuestas, Liberatus fue capaz de juntar la impresionante cantidad de dinero equivalente a $1.76 millones de dólares en fichas, una cifra para nada despreciable teniendo en cuenta que jugó contra profesionales como Dong Kim, Jimmy Chou, Daniel McAulay y Jason Les. Liberatus alcanzó un punto sin precedentes en cuanto la generación de estrategias en base a información imperfecta. El sistema de IA de Liberatus fue tan potente que en determinado momento sus oponentes empezaron a compartirse notas sobre debilidades que le encontraban en un intento de ganarle con la experiencia de todos juntos, pero sucedió todo lo contrario, la maquina fue aprendiendo de estas estrategias y se preparaba mejor en cada partida.
Tuomas Sandholm, quien ejerce como profesor en la Universidad y es parte del proyecto, explicó: “A medida que los juegos iban terminando cada día, un meta algoritmo iba analizando que debilidades del sistema Libratus habían aprovechado los profesionales. Una vez que identificaba las debilidades, seleccionaba las tres más utilizadas en contra de la Inteligencia Artificial, y a través de un algoritmo que corrió durante toda la noche en la supercomputadora, corregía las estrategias para evitar que vuelvan a utilizar las mismas jugadas en su contra“, y agregó: “Esto es muy diferente de como se intentaba programar inteligencias de Poker en el pasado, ya que antes los investigadores solían desarrollar algoritmos para intentar explotar las debilidades de los oponentes, y en contraste nosotros desarrollamos un algoritmo que todas las noches intenta corregir los errores de sus propias estrategias“.
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Un aspecto que hace muy difícil de diseñar una Inteligencia Artificial que pueda ganarle a oponentes humanos en el Poker a diferencia de otros juegos de mesa, es que en el Poker uno no puede ver las cartas que tienen los oponentes en sus manos, por lo que no tiene toda la información necesaria para saber cómo uno puede ganar o perder la partida, diferente es en el Go en donde aunque las posibilidades de cada movida son muy grandes, la maquina es capaz de saber cuáles son y qué consecuencias le traerían. En el Poker la mentira es parte central del juego. En ese sentido Frank Pfenning, líder del departamento de ciencias de la computación dijo: “La computadora no puede ganar si no puede engañar. Desarrollar una Inteligencia Artificial que exitosamente puede desarrollar una tarea así es un avance científico tremendo que se puede aplicar en muchas situaciones”, y para ejemplificar agregó: “Imagina si un día tu smartphone es capaz de negociar el mejor precio de un auto nuevo o departamento. Ese seria solo el comienzo.”
Finalmente hay que destacar que aunque los humanos perdieron contra este nuevo tipo de Inteligencia Artificial, se llevaron a sus casas una parte del premio de U$S 200.000. No sabemos a ustedes, pero a nosotros nos suena un poco Skynet el tema, primero la IA es capaz de engañar para negociar precios más baratos y después termina engañándonos haciéndonos creer que trabaja para nosotros cuando en realidad está juntando recursos para crear su propio ejercito de maquinas.