Según un informe, recientemente un usuario anónimo de 4chan compartió “todo el código fuente perteneciente a The New York Time Company”. Sin embargo, la empresa mencionó que el incidente fue en enero de 2024 y que, en ese momento, “tomaron las medidas apropiadas”.
Las filtraciones, hackeos y robos de datos siguen. Esta vez le tocó al New York Times Company, empresa de comunicación de la que están hablando muchos después de que un usuario anónimo de 4chan compartiera “básicamente todo el código fuente” de la compañía. Según afirmó, esta filtración es de 270 GB de datos internos.
The Register informó que la filtración equivale aproximadamente a 5.000 repositorios y 3,6 millones de archivos que estaban disponibles para descargar desde redes peer-to-peer. Entre los archivos se encuentran planos del popular juego Wordle, información de campañas de marketing por correo electrónico, informes publicitarios, información personal y más. Es más, el filtrador mencionó que se cifraron “menos de 30” repositorios.
Sin embargo, como todo esto viene de un usuario anónimo de 4chan, la filtración y el contenido de ella se estaba tomando entre pinzas hasta que el New York Times dijera algo al respecto. Y así fue. Según mencionó The Registrer, el medio dijo que sus sistemas son sólidos y que un proveedor externo tuvo un incidente hace seis meses que habría sido la fuente de la publicación de 4chan.
“El evento subyacente relacionado con la publicación de ayer ocurrió en enero de 2024, cuando inadvertidamente se puso a disposición una credencial para una plataforma de código de terceros basada en la nube. El problema se identificó rápidamente y tomamos las medidas apropiadas en respuesta en ese momento. No hay indicios de acceso no autorizado a los sistemas propiedad del Times ni impacto en nuestras operaciones relacionadas con este evento”, dijo un portavoz del New York Times.
Lamentablemente, esta no es la primera vez que el medio es víctima de un hackeo. En 2013, el New York Times y otros medios de comunicación sufrieron ciberataques por parte de un grupo de hackers autodenominado Ejército Electrónico Sirio. Estos incidentes, que duraron varios meses, a veces impedían que los lectores pudieran visitar los sitios web de algunas publicaciones. En otros casos, los atacantes cambiaban el contenido de las páginas por sus propios mensajes o directamente cerraban el sitio.
Unos años más tarde, en 2016, el New York Times y otras organizaciones de noticias estadounidenses volvieron a ser atacadas pero por presuntos ciberespías rusos, que se metieron en las bandejas de entrada de correo electrónico de los medios.