Gracias a diferentes estudios y algoritmos, estudiantes de Stanford, Harvard, la Universidad de Nueva Gales del Sur y la empresa Zeiss desarrollaron el Google Maps de la anatomía que permite sumergirse en el cuerpo humano hasta lo más profundo de sus células.
La tecnología, creada por Zeiss inicialmente para detectar defectos en semiconductores de silicio, recurre a los mismos algoritmos que hacen funcionar Google Maps. Básicamente se trata de generar imágenes con técnicas microscópicas y procesarlas con los algoritmos del reconocido buscador para crear mapas instantáneos.
Gracias a la combinación de ambas técnicas, sera posible ver en directo las conexiones en el cerebro, comprender las señales moleculares en los tejidos y desarrollar tratamientos específicos para decenas de dolencias.
Por ahora, el proyecto inicialmente se esta enfocando en como el movimiento afecta las caderas, utilizando datos de diferentes estudio, incluidos resonancia magnética y microtomos y todo está unido a través de algoritmos creados por Google.
“Esto podría crear nuevos tratamientos, rutinas de rehabilitación o técnicas preventivas, y los resultados solo van a mejorar mientras más datos se recopilen y los algoritmos y microscopios, encargados de obtener las imágenes mejoren”, refieren los desarrolladores.