La serie protagonizada por la abogada Jennifer Walters llegó a su fin y, durante el último capítulo, She-Hulk rompió la cuarta pared de una manera nunca antes vista en el MCU.
Te haya enganchado She-Hulk o no, el último capítulo seguramente no solo te sorprendió sino que también te dejó con ganas de más. Si bien ya sabíamos que esta serie iba a romper con la cuarta pared en cada episodio (como suele ser costumbre en los cómics de Jennifer Walters), el cierre de esta temporada fue un mimo para muchos fans que leían la historia en las páginas.
Jen Walters rompe la cuarta pared, habla con los lectores y escritores, borra la línea entre la ficción y la realidad desde los 80. Sí, esta vez la serie de She-Hulk introdujo este humor y nuevo método en el MCU, pero que quede claro que no es para nada algo nuevo en Marvel. Uno de los primeros ejemplos los vimos en 1962 con Fantastic Four #4, Jack Kirby y Stan Lee mostraron a Johnny Storm mientras leía un cómic de Sub-Mariner de la década de 1940. Después, volvieron a repetirlo, pero esta vez Johnny estaba leyendo una copia de Incredible Hulk #1, un número publicado apenas un mes antes de Fantastic Four #5.
Sin embargo, a finales de 1988, John Byrne se arremangó y en Marvel Comics Presents #18 mostró a Jennifer Walters meditando sobre su propia historia. Además, también la vemos abrir un regalo de Navidad de Marvel que tenía varios cómics de She-Hulk #1, confirmándonos ahí que saldría su propio cómic en 1989. Y eso solo continuó cuando Byrne se apoderó de She-Hulk y cambió el personaje para siempre.
Que el personaje pudiera romper la cuarta pared le permitió a Byrne estar en una conversación constante con el lector, no solo sobre lo que estaba pasando en la historia, sino también sobre el resto de los cómics, la industria y demás tópicos de Marvel. Esto fue algo que generó muchísimo éxito para She-Hulk, ya que no solo cambió a la heroína, sino también a la naturaleza de la narración de cómics.
Una vez que Sensational She-Hulk terminó en 1994, ese formato desapareció por 10 años. Recién en 2004, el escritor Dan Slott y el artista Juan Bobillo trajeron de regreso la tradición autorreferencial de She-Hulk, pero no se enfocaron tanto en romper realmente la cuarta pared. Ahí fue donde hicieron que Jennifer trabajara para el bufete de abogados GLK&H, el mismo que vimos en la serie. ¿Qué modificó esto? Que She-Hulk pudiera comentar no solo sobre su historia, sino también sobre la de otros héroes.
Desde el primer capítulo de She-Hulk, Jennifer Walters rompe la cuarta pared (fiel a su estilo) y nos deja en claro que ella ya es una Hulk y que nos va a contar cómo llegó hasta ese punto. De esta manera sabemos que nos mostrará algo que todos queremos ver: un cameo de Bruce Banner. Tanto Jen como los creadores y escritores de la serie saben que la audiencia está esperando la aparición de algún personaje del MCU, por eso es que se aprovechan de eso en varios momentos de la serie. Como cuando muchos esperaban que apareciera Daredevil.
A diferencia del resto de los héroes, She-Hulk está consciente de que está en una serie y que es un personaje menos conocido dentro de una franquicia sumamente popular. Es más, incluso lo menciona en algunos momentos, haciendo referencias a estrellas invitadas y héroes más famosos que ella. Sin embargo, siempre deja en claro (o al menos lo intenta) que esa es su serie y que ella es la protagonista.
Durante la primera parte del último episodio de She-Hulk, Jen tiene una mala noticia detrás de la otra. Desde que tiene que usar un inhibidor para no convertirse en su alter ego, perder su trabajo, volver a vivir con sus padres, hasta descubrir la verdad sobre Intelligencia. En un momento incluso escuchamos que empieza a narrar otra persona que no es She-Hulk y ella rompe la cuarta pared y dice que las cosas no están tan mal para que eso pase.
Sin embargo, cuando se revela que Todd es Hulk King, vemos a Abominación contra Hulk (que aparece de la nada) y llega Tatiana a no sabemos qué (todo en el mismo lugar), Jen decide hacer algo al respecto y atraviesa el catálogo de Disney+ para llegar al mundo real y hablar con los responsables de la serie (incluida la creadora Jessica Gao y el escritor Cody Ziglar). Esto es un movimiento clásico de She-Hulk, algo que seguro les recordó a los fans que leían los cómics cuando ella molestaba a John Byrne por escribir algo que no le gustaba.
Otra cosa que seguramente les sonó muy familiar a los lectores de los cómics fue ver a She-Hulk actuar como audiencia, comentándole a K.E.V.I.N todas las cosas que nos preguntamos, escribimos y cuestionamos nosotros. Un ejemplo claro fue la pregunta de cuándo llegarán los X-Men al MCU. Además de esto, el final de la serie le dio a Jen el poder para decidir cómo terminar su propia historia y controlar la narrativa, algo que también encaja con su historia en los cómics.
Sin embargo, para los espectadores de la serie, que She-Hulk haya salido de su mundo para meterse en el nuestro seguramente dejó a uno con la boca abierta. Es algo completamente nuevo, incluso comparándolo con los demás programas que rompieron la cuarta pared, ya que la narrativa suele quedarse dentro del mundo del show.
Así que veremos qué otro personaje del MCU sigue los pasos de la abogada Walters y rompe la cuarta pared. Uno de los candidatos que se postula para hacer esto es Deadpool, quien ya venía haciéndolo pero fuera del Universo Cinematográfico de Marvel.