La empresa de streaming a nivel mundial más importante de hoy en día, se encuentra en pleno proceso de negociaciones para generar contenidos propios de la serie británica.
Desde su estreno, Netflix se hizo propietario de los derechos de emisión de Black Mirror en los Estados Unidos. Ahora la productora de series como House of Cards u Orange is The New Black, sumó la serie inglesa a su agenda y comenzará a producir nuevos capítulos totalmente originales.
A pesar de que la distópica historia creada por Charlie Brooker sólo consta de 7 capítulos y un especial navideño, es una de las series de culto más aclamadas por la crítica tanto británica como estadounidense.
Black Mirror refleja el uso de la tecnología en una sociedad que está diseñada de forma específica para funcionar solamente mediante tecnología.
Cada uno de los siete episodios muestran un futuro alterno en el que no existe lugar para los sentimientos humanos. Es entonces donde los protagonistas de cada capítulo intentan luchar contra el sistema en el que coexisten. Black Mirror ofrece un mensaje acerca del uso excesivo de la tecnología, además de críticas contra los sistemas políticos o las distintas problemáticas sociales.
Por el momento, no hay un anuncio oficial de Netflix ni House of Tomorrow, la productora de Charlie Brooker. Pero según Radio Times, la revista semanal de programación de radio y televisión de la BBC, las negociaciones entre ambas productoras empezaron en el mes de mayo y al parecer concretarán el acuerdo.