Para sorpresa de muchos, Adam Driver habló después de varios años sobre su personaje en Star Wars, Kylo Ren, y parece que podríamos haber tenido a un villano distinto. Te contamos por qué ¡En esta nota!
En una reciente entrevista el actor que interpreta a Kylo Ren en las últimas tres películas de Star Wars, Adam Driver, explicó que en realidad el personaje no iba a redimirse y que la idea que tenían para él era muy diferente. En estas tres entregas que salieron luego de la franquicia principal tenemos a Kylo, a quien nos lo presentan como el antagonista de toda la historia. Pero para el final de la tercera película el personaje se redime como ocurrió originalmente con Darth Vader.
Según explicó Driver, este no era el caso ya que no querían que hubiera un paralelismo con lo que pasó con Anakin Skywalker. El plan principal no era que Ben Solo se redimiera e incluso el actor comentó que cuando fue casteado su final no iba a ser ese. Incluso dijo que el arco de redención apareció antes de que saliera The Rise of Skywalker, y que Lucasfilm lo decidió porque no tenían un plan concreto sobre cómo terminar la trilogía. Kylo es un personaje que fue seducido por el Lado Oscuro, mató a su propio padre (Han Solo), mató incluso a su maestro y se convirtió en el Líder Supremo de la Primera Orden.
Todo esto pasó en las dos primeras entregas, pero de golpe en la última cambió todo y el personaje se redimió gracias a Rey. Pero el arco de Kylo podría haber sido muy diferente, ya que no estaba en los planes que eso ocurriera. En The Rise of Skywalker, se revela que Palpatine estaba vivo y que era el abuelo de Rey. Sin embargo, la derrota de la protagonista y la posterior curación de Kylo junto con la muerte de Leia impulsaron a que el personaje quiera redimirse. Y es por esto que de la nada ayuda a la protagonista e incluso se enfrenta a Palpatine. Pero el evento que lo convierte en un personaje que ya no es más parte del Lado Oscuro es que decide dar su vida para salvar a Rey.
Todo esto podría no haber pasado según confirmó Driver. El actor reveló que si el personaje continuaba en el Lado Oscuro se hubiera convertido en el anti Anakin. Kylo comienza su aventura en las secuelas como alguien que no está seguro de sí mismo y que incluso es débil para el Lado Oscuro. Pero esto cambia cuando decide matar a su padre al final de la primer entrega. Según el actor, en las otras dos películas la idea era que Kylo continuara realizando actividades que lo acercaban más al Lado Oscuro. Incluso el hecho de que matara a Snoke, su propio Maestro, ayudaba a que el personaje se diera cuenta del poder que tiene si se mantiene de ese lado.
Pero finalmente en la última entrega tuvimos un arco de redención muy similar al de Anakin, quien a diferencia de su nieto comenzó como alguien muy fuerte en el Lado Oscuro y terminó perdiendo todo ese poder para salvar a su familia. Si Kylo se quedaba como en las primeras entregas, podría haber sido el heredero de Darth Vader, y Rey la de Anakin, el lado bueno del villano. Kylo podría haber terminado con lo que su abuelo comenzó, pero los guionistas de Star Wars decidieron hacer un paralelismo entre nieto-abuelo y regalarle al personaje un final donde era bueno.
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